Las acciones contra la inseguridad y los grupos delictivos, a los cuales se llegó a calificar como terroristas para poder enfrentarlos con mayor fuerza, tuvieron un iniciar que fue aplaudido por todos, pues se creyó que con esto se podría darle ‘duro’ a una era violenta en el país. Pero pasan los días y la realidad es que todo está casi igual.

Una de las principales preocupaciones ciudadanas son las extorsiones, a cargo de esos mismos grupos delictivos que se combaten. Ni el estado de excepción los amilanó. Negocios tan sencillos como tiendas, bazares, peluquerías, talleres siguen siendo amenazados y pagando las mal llamadas ‘vacunas’ para poder sobrevivir. Y las muertes por este motivo siguen dándose. ¡Que la Policía y las Fuerzas Armadas hagan algo! Protejan a quienes quieren trabajar por el bien del país, protejan a nuestra gente.