Es una de las figuras con más reputación dentro de la gastronomía colombiana. Su nombre logró traspasar las fronteras no solo por los platos que prepara, sino además porque es uno de los personajes de ‘MasterChef’, franquicia de cocina en la que Jorge Rausch califica a los participantes con severidad. 

Cada noche se lo puede ver por Teleamazonas, canal que lo contrató para que sea parte de la segunda temporada del programa que a mediados de diciembre se terminó de grabar en Colombia. Desde Bogotá, su ciudad natal, el chef le concedió a DOMINGUERO una entrevista en la que habló de sus gustos, del cierre de varios de sus restaurantes y sus retos.

¿Cuáles son sus expectativas para el 2021?

Es tan difícil saber porque es un año duro. Todavía la vacuna no va a llegar tan rápido y las consecuencias reales de esta pandemia se van a dimensionar el año entrante. El 2021 será muy retador, toca echar pa’ lante, no hay de otra.

Hay retos también para sus restaurantes. Tiene 9. ¿Qué pasará con ellos?

Hemos tenido que cerrar varios. Unos están cerrados y tratamos de abrirlos de vuelta y otros definitivamente van a cerrar. Y con lo que está pasando...

En esta nueva temporada de ‘MasterChef Ecuador’ salió con una imagen renovada. ¿Cómo así tomó esa determinación?

Siempre había tenido este peso, pero en los dos últimos años subí mucho con tanto viaje y tanta cosa. Me puse las pilas y volví a mi peso normal, haciendo dieta y ejercicios. Ahora me siento mucho mejor así.

Por ahí leo algunos coqueteos de parte de seguidoras.

¿Por qué no? No tiene nada de malo.

Está enamorado de una mujer joven, guapa, con pinta de modelo.

Tengo una novia, es muy linda.

Muchos de los participantes de los programas le temen, por esas caras que pone al momento de juzgar. ¿Son parte del show o trata de que los concursantes vean sus errores?

Soy chef y no actor. Le explicó: ‘MasterChef’ es un programa de cocina con televidentes. Nosotros tenemos que ser muy expresivos, muy claros. No es show. Lo que pasa es que es un programa y la gente no puede probar la comida, y si no se les explica muy bien los platos, no van a entender el programa.

Con su cara lo dice todo. Es muy expresivo.

Ya usted lo está diciendo.

¿Le ha tocado probar platos muy malos?

A veces, y la verdad es que no son muy buenos.

¿Cuál es el sabor que menos le gusta a Jorge Rausch?

Todos los sabores me gustan, lo que no me gusta es la comida mal preparada, maltratada. Todos los ingredientes y sabores me gustan cuando están bien cocinados.

Tiene un colega, Andrew Zimmer, que recorre todo el mundo probando comidas raras. ¿Se atrevería a hacer un programa así?

¿Por qué no?

¿Estaría dispuesto a comer murciélagos, ojos...?

Si los probamos en ‘MasterChef’, no se pone peor que eso, ¡claro que sí lo haría! (risas).

¿Cuál es el sabor más rico, aquel que le agrada?

Lo que pasa es que es igual a lo que no me gusta, y las cosas bien preparadas son todas ricas. Los huevos son ricos, el caviar, cualquier cosa bien hecha es bien agradable,; no tengo comidas favoritas.

¿No tiene ninguna?

Algo que uno se come con los amigos es algo distinto de lo que se comería con la novia. Es distinto lo que se comería en la playa, de lo que se comería en un sitio frío; todo depende de la ocasión.

Pero chef, siempre hay algo que uno se comería dos veces y de eso quisiera pedir más.

Bueno, me encantan los huevos.

Un cocinero con un paladar tan exquisito y que le guste algo tan simple como un par de huevos...

¡Imagínese! Es que nunca contesto esa pregunta, porque no tengo una comida favorita. Depende de dónde esté. Depende del sitio, pueden ser camarones, paté de hígado, algo caliente, frío. Hay comida para ver TV, para ver con los amigos o con la novia.