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Estos tres sujetos supuestamente tenían retenido a un taxista que manejaba una furgoneta en el norte de la capital.Cortesía

Secuestro en Quito: La dramática historia del taxista retenido en La Roldós

El hombre hizo una carrera desde Ciudadela Bicentenario, en el norte la ciudad, desde donde fue retenido a la fuerza

Un hombre fue rescatado por la policía tras permanecer secuestrado al interior de su vehículo, en el norte de Quito. “Mi vida corría peligro porque estaba secuestrado”, manifestó el individuo, por cuyo caso fueron detenidas tres personas, que están con prisión preventiva.

Este 24 de febrero, miembros de la Policía explicaron que la novedad se registró durante la noche del 22 de febrero en la ciudadela Bicentenario, norte de la urbe. El afectado estaba a bordo de un vehículo marca Carry y realizaba carreras de taxi mediante una aplicación virtual.

Mauricio León, comandante (subrogante) del Distrito de Quito, detalló que el hecho fue comunicado a un grupo especial llamado Linces, de la institución, el cual supo que se estaba cometiendo “un acto delincuencial” dentro del automotor, que avanzaba por la zona norteña de Quito.

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La detención de los secuestradores

Entre las evidencias encontradas consta un arma de fuego.Cortesía

Cuando el vehículo llegó hasta el sector de La Roldós, el equipo especial lo interceptó y detuvo a tres individuos, quienes intentaron amedrentar a los agentes con un arma de fuego. Sin embargo, los uniformados lograron someter a los implicados y cuando la situación estuvo controlada, se percataron de que la víctima estaba en la parte trasera del automotor (tipo furgoneta).

El hombre estaba maniatado y los criminales le habían quitado su celular y otras pertenencias. Los sujetos fueron identificados como Antonio Marulanda, Jordy Aspacio y Joel Carcelén, quienes fueron llevados hasta la Unidad de Flagrancia del centro-norte de la ciudad. Allí se llevó a cabo la audiencia en su contra por el delito de secuestro extorsivo.

De los tres, solamente Carcelén se defendió en la diligencia, diciendo que él no tenía nada que ver y que supuestamente lo capturaron cuando caminaba por la zona. “Yo bajaba porque iba a comprar un trago de piña-coco”, argumentó este sujeto, lo cual no sirvió de nada porque él y sus ‘panas’ quedaron tras las rejas.

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