Dos delincuentes aparecieron de repente e interceptaron a un joven que caminaba por Carcelén Alto, en el norte de la capital.

Uno de los pillos sacó un cuchillo, amenazó a su víctima y la abrazó por el cuello. El otro le arranchó el celular. Como ‘pirañas’. Luego huyeron.

El hecho sucedió la tarde del jueves y quedó registrado en una cámara de vigilancia del sector. El afectado no puso la denuncia, pero la policía ya levantó el perfil de los sospechosos y están tras su pista.

El robo con armas blancas es uno de los principales problemas en el Distrito La Delicia. El coronel de esta zona, Jimmy Viteri, indicó que diariamente detienen de 10 a 12 sujetos con cuchillos, machetes o navajas. “Incluso hemos decomisado cucharas a las que les hacen filo”, comentó.

El mismo jueves, por la noche, en el sector de La Roldós, los hermanos Yalama sufrieron un asalto. Mientras preparaban la comida en su quiosco, dos sujetos en una motocicleta se acercaron a ellos.

Uno de los hampones intentó arrancharle el celular a Anthony, pero este corrió junto a su ñaño al interior de una vivienda. El pillo los persiguió hasta un patio y forcejeó con el joven. Al no lograr quitarle el teléfono, el agresor lo apuñaló en el hombro y se fue gritando: “¡Toma maldito!”.

Andy llamó a la policía para denunciar el hecho y a una ambulancia para que atendieran a su hermano. Los uniformados llegaron primero y tomaron la versión de los jóvenes. Esperaron 20 minutos hasta que llegaran los paramédicos, pero al no tener respuesta lo trasladaron en un patrullero hasta el Hospital de Calderón.

Mientras tanto, Andy acompañó a los policías para ubicar a los agresores por el sector. Cuando circulaban por la calle Rumihurco, divisó a dos sujetos con las mismas características en una moto. Los agentes le pidieron al conductor que detuviera la marcha, pero este no hizo caso y tras una persecución fueron capturados.

Andy reconoció al conductor como la persona que habría apuñalado a su hermano menor. El sospechoso tenía una mancha de sangre en su pantalón. Por si fuera poco, su compinche era menor de edad.

Ambos fueron llevados hasta la Unidad de Flagrancia para iniciar el proceso judicial en su contra por el delito de robo con violencia.

El coronel Viteri reconoció que en los últimos casos reportados se ha incrementado la violencia de los delincuentes para atacar a sus víctimas. Según él, muchos de los pillos que son detenidos suelen estar bajo los efectos de alguna sustancia estupefaciente o del alcohol. 

Otro caso 

En el sector de El Inca, dos mujeres fueron atacadas por sujetos que viajaban en moto. El suceso también quedó registrado en video. Las señoras conversaban en la puerta de una casa, cuando los sospechosos frenaron frente a ellas. El copiloto se bajó y forcejeo con una, quien no quiso dejarse robar. Entonces el pillo la lanzó al suelo y allí la pateó varias veces.