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El derrumbe del muro pone en riesgo a todo el complejo arqueológico Malqui Machay.GLORIA TACO

Muro prehispánico en La Maná se derrumbó por las lluvias

El Instituto Nacional de Patrimonio Cultural (INPC) ha sido notificado. El complejo arqueológico fue descubierto en 2010

El sitio arqueológico Malqui Machay, ubicado en el cantón La Maná (Cotopaxi), ha sufrido daños severos debido a las intensas lluvias registradas en los últimos días. Según informó el Instituto Nacional de Patrimonio Cultural (INPC) Zonal 3, el colapso parcial del muro prehispánico norte, sucedido el jueves 13 de marzo, ha afectado gravemente la estructura del lugar.

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Se estima que aproximadamente cinco metros de ancho y un volumen de 10 metros cúbicos de piedra se desplomaron, generando una afectación total de alrededor de 100 metros cuadrados. El curso torrentoso del río Quindigua, que acompaña el paisaje de la selva subtropical de Guasaganda, ha intensificado los efectos de la erosión, poniendo en riesgo el conjunto arqueológico.

Francisco Moncayo Naranjo, custodio del proyecto arqueológico, manifestó su preocupación ante la situación. “Han pasado diez años desde la última intervención y el invierno ha vuelto a causar estragos”, señaló.

Ante esta emergencia, un equipo técnico del INPC Zonal 3 acudió al lugar para evaluar los daños y establecer medidas urgentes de conservación. Durante la inspección, se hallaron fragmentos de cerámica de las épocas prehispánica y republicana, así como una lasca de obsidiana y restos de carbón vegetal, lo que confirma la riqueza arqueológica del sitio.

El INPC ha emitido un informe técnico con recomendaciones prioritarias para la gestión de medidas de protección. Este documento ha sido remitido al Gobernador de Cotopaxi y a la Tenencia Política de Guasaganda, con el fin de coordinar esfuerzos para mitigar el deterioro del sitio.

Las intervenciones

Desde su descubrimiento en 2010, el sitio fue intervenido en cuatro ocasiones hasta 2015, pero una restauración deficiente generó problemas estructurales adicionales. “Denunciamos la situación y notificamos al entonces secretario de Patrimonio, pero no hubo respuestas contundentes”, afirmó.

Actualmente, la zona enfrenta una situación crítica. La caída de árboles y la acumulación de agua en el lado norte, por donde se desfogan las lluvias, agravan el problema.