Cuando reparaba la caja de cambio de un carro, en el interior de su taller, asesinaron al mecánico Ramón Vicente Ramírez, de 53 años. Un sujeto que se bajó de una moto lo atacó. El hombre recibió cinco tiros en su cabeza y terminó entre sus herramientas, en el sur del cantón La Libertad, Santa Elena.

Luis Pugga, jefe policial en La Libertad, contó que “el sicario entró por la puerta y disparó al mecánico”. Y reveló que la víctima registra un antecedente penal en el año 2012, por el delito de estafa. El ataque se registró este 15 de mayo de 2024.

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" Era muy buen maestro, siempre se lo buscaba porque era un experto en cajas de cambio. No creo que haya andado en cosas negativas. La policía debe investigar y encontrar a los culpables”, comentó uno de los presentes. Otros aseguraron que se lo veía tranquilo y dedicado de lleno a su trabajo

A las 19:45 del martes 14 de mayo de 2024, Karen Figueroa caminaba con su hijo, de 16 años, hacia su vivienda en el barrio 5 de Junio del cantón La Libertad, cuando dos sujetos en moto dispararon contra el chico. La mujer pidió piedad para su vástago, pero también le dispararon a ella.

El muchacho fue llevado al Hospital Rafael Serrano, pero al ingresar a la casa de salud confirmaron su deceso. Su madre resultó herida en un glúteo y fue intervenida. La mañana de este miércoles 15 de mayo, ella preguntó por su muchacho y al darle la mala noticia sufrió una recaída, comentó uno de los parientes.

Madre e hijo “eran muy unidos madre e hijo, él chico le ayudaba en la venta de corviches, chuzos, alitas de pollo. Es una desgracia terrible para la familia”, sostuvo el allegado.

Y este ataque a Karen y su hijo fue casi simultáneo al crimen de Antony Duarte Guerrero, de 27 años, llamado Ronaldiño, quien laboraba en un negocio de venta de puro de caña (guanchaca) en la calle 21 y avenida 18, en el barrio Abdón Calderón de La Libertad.

Dos sujetos se bajaron de un taxi, entraron al local, supuestamente para comprar el producto, y cuando la víctima les despacha el 'trago', los supuestos clientes le dispararon a quema ropa. 

Ronaldiño no era oriundo de la Península, llegó desde El Empalme (Guayas) muy pequeño con su  madre al sector donde fue asesinado. Allí se crió y por un buen tiempo desapareció, hace poco volvió al barrio e instaló el negocio con su suegro.

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