Exclusivo
Opinión
Editorial: ¡No son nuestras cocineras!
Ojalá todos entendamos que este es el Día de la Madre, no de los hijos que llegan a casa de la ‘vieja’ supuestamente a felicitarla y, con pretexto de ello, se pegan sus borracheras con los ‘panas’ en la esquina. Claro está, ¡celebrando a mamá!, dicen.
Tampoco es el día de los hijos, nietos y más que llenan la casa ‘de alegría’ y arman la fiestota con un beso inicial a mamá, que llena de felicidad se ve obligada a meterse a la cocina a preparar algo para atenderlos y tener contentos a quienes llegaron a celebrar su día. Y como regalo: una cocina, unas ollas, una plancha, una sartén... Entiéndanlo bien: ella NO es su cocinera. No es su sirviente que atiende a los niños mientras los demás celebran en su honor.
Ojalá hoy celebremos a mamá como se debe, que ella sea la que disfrute, baile, se tome unos tragos... Alegremos su día de verdad. ¡Feliz día, madres!