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José Pileggi y un complicado reto en Emelec
José Pileggi, nuevo presidente de Emelec, tiene como primera meta finiquitar el contrato con Ismael Rescalvo, potenciar al primer plantel y formativas
Guayaquileño, empresario y principalmente azul de corazón. Así se define José Pileggi, quien el martes 1 de noviembre fue elegido como nuevo presidente de Emelec.
Pese a que no tiene una dilatada trayectoria en el ámbito deportivo (recién desde el 2020 asumió las riendas de las formativas del elenco millonario), para los fanáticos azules Pileggi era la mejor opción para reemplazar a Nassib Neme, quien estuvo en el cargo desde el 2011.
En la figura del nuevo timonel de Emelec recaen varias necesidades, que para los hinchas del Foco deben ser tratadas con urgencia.
Cambio de DT
La salida del estratega Ismael Rescalvo es una de las primeras acciones que Pileggi se comprometió en cumplir.
Durante su campaña, el empresario de 58 años aseguró no estar conforme con el trabajo del DT español y advirtió que apenas asuma las riendas del equipo se sentará a negociar la rescisión de su contrato, el cual está firmado hasta diciembre de 2023.
Refuerzos de calidad
En los últimos años Emelec ha tenido problemas a la hora de realizar contrataciones. Pileggi destacó que para el próximo año buscará potenciar al club con 5 o 6 jugadores, entre nacionales y extranjeros.
Campeonatos
Otra de sus propuestas de campaña del nuevo presidente es la de volver a celebrar un título nacional, algo que no lo hace desde 2017.
Además, hacer una buena campaña a nivel internacional. En 2023 el Foco jugará la Copa Sudamericana.
Formativas
Pileggi se ha comprometido también en seguir trabajando en las divisiones menores del cuadro eléctrico.
El nuevo presidente espera emular lo que hace actualmente Independiente del Valle: formar y vender jugadores.
Reducción de gastos
En base a su visión empresarial, el titular de Emelec se comprometió a bajar los gastos del equipo para el próximo año.
Esta temporada los azules tuvieron un presupuesto aproximado a los $12 millones, por lo que Pileggi espera ajustar el gasto a menos de $10 millones. Además, incrementar los auspiciantes, como por ejemplo el de vender el nombre del estadio, por un determinado tiempo, a una empresa local o extranjera.