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Emiliano Martínez celebrando con su familia en la cancha de Lusail en Catar.Ronald Wittek

El festejo más tierno en una Copa del Mundo

Familiares de los jugadores argentinos se tomaron la cancha en Catar.

Fue la premiación a un campeón mundial de fútbol con más sentimiento nunca antes visto, fue para el aplauso ver como esposas, hijos, padres y tíos de los jugadores de Argentina llegaron hasta la cancha del estadio de Lusail en Catar.

Atrás quedó el protocolo de que no debían invadir el césped personas ajenas a los jugadores, pero estas no eran desconocidas, sino quienes se tenían que “aguantar” sus lágrimas cuando los cracks perdían un partido o salían lesionados.

Toda la familia de Julián Álvarez abraza al ‘pelado’ de 22 años, el chico que soñó jugar con Messi, esta vez sus familiares le secaban las lágrimas de alegría. Todos los Álvarez llevaban impreso su apellido en sus camisetas.

El golero Emiliano Martínez se llevó hasta el arco a su esposa e hijos, donde lloró como un niño de tanta alegría.

Más allá estaba Alejandro ‘Papu’ Gómez, le llevaba el trofeo a su esposa y sus pequeñas hijas se dedicaban a tomarse fotos, estas escenas jamás se pensaron en un Mundial, antes de Catar 2022, era imposible pensar que la cancha estaría llena de tantos familiares.

Alejandro Papu Gómez invitó a su familia a conocer la Copa del Mundo.Ronald Wittek

Lautaro Martínez tuvo un festejo increíble, estaba con su esposa y seres queridos, trataba de mostrarle la Copa del Mundo a su pequeña Nina, pero ella se enfocaba más en su chupón.

Al final una foto con todas las mujeres de los jugadores, esposas y novias, esas que son el ‘paño de lágrimas’ cuando las cosas no salen bien, ahora eran las dueñas de la Copa del Mundo.

Lo mejor del festejo fue la presencia de sus seres queridos y un recuerdo imborrable, tuvieron que pasar 36 años para que los argentinos la tengan en sus manos, ya que ningún jugador de los campeones había nacido.

Lautaro Martínez con su esposa y su hija Nina con la Copa del Mundo.Friedemann Vogel