Después de cuatro años Emelec volverá a disputar la segunda fase de la Copa Sudamericana (en 2016 fue eliminado por Deportivo La Guaira), partidos que pueden “servir” para que los azules le den vuelta a su mal presente futbolístico, según el exjugador Raúl Avilés.

“Mentalmente los puede sobreponer, porque van de cero en la llave y no tienen la presión de malos resultados en ese torneo (Sudamericana). Los jugadores lo pueden tomar como un desahogo, que marque un antes y les sirva de motivación para que cambien su presente, porque localmente no pasa nada, juegan feo”, dijo Avilés.

En las nueve veces que el Bombillo participó en Sudamericana (2009, 10, 11, 12, 13, 14, 15, 16 y 20) nunca enfrentó a un argentino. Ante Unión, la Turbina considera que el Foco “no es favorito”, pero puede sacar un buen resultado, ya que el rival “tampoco es un ‘cuco’ y vienen sin jugar”, de forma oficial desde marzo pasado.

“En los papeles el rival no tiene mayormente desenvolvimiento. Ahora hay que ver si tienen la jerarquía para aguantar la presión de este torneo. Al jugar de visita incluso se pueden olvidar de que no pueden ganar en el Capwell. Salir del entorno local, donde no dan pie con bola, les puede ayudar para sacar un buen resultado en el partido que no son favoritos”, manifestó el exEmelec.

Unión, que cambió casi a medio equipo y tiene nuevo entrenador (Juan Manuel Azconzábal), llegó a esta instancia al eliminar al Atlético Mineiro (3-2), en febrero pasado. Walter Bou, Jalil Elías, Javier Méndez, Federico Milo y Jonathan Bottinelli, titulares ante los brasileños, ya no están en el club.

Por su parte, los eléctricos superaron al boliviano Blooming (5-0), previo a la paralización de los torneos Conmebol por la pandemia de COVID.

Para este enfrentamiento fueron descartados el mediocampista colombiano Alexis Zapata y el arquero Adrián Bone, ambos afectados por lesiones, y en su lugar ingresaron los juveniles Silvano Estacio y Edgar Lastre.

La revancha (la vuelta) se jugará el próximo 5 de noviembre en el Capwell.