¿No se ponen de acuerdo en el momento de tener sexo? Tranquilos, pues ya sabemos cuál es la hora ‘pepa’ para alcanzar mayor placer en la cama.

Ajusten el despertador a las 05:48. Ni un minuto antes, ni uno menos. Y no es broma. Esta, según la Asociación Médica Británica, es la mejor hora para tener relaciones sexuales y alcanzar el orgasmo.

La explicación científica, según el estudio de esta entidad, publicado en la revista British Medical Journal, está en la testosterona, que a esa hora (sí, en la madrugada) ofrece niveles muy altos tanto en hombres como en mujeres. Y es el requisito indispensable previo a la actividad sexual.

Los investigadores afirman que la dosis de esta hormona es, en los hombres, entre un 25 y un 50 por ciento mayor por la mañana que durante el resto del día. La razón está en la glándula que regula su producción: tiene mayor actividad por la noche (tanto en ellos como en ellas), mientras dormimos.

¿Cuáles son las razones para ser parte del club de los ‘mañaneros’? Pues algunos y son interesantes: las personas suelen estar más descansadas y relajadas a primera hora del día, por lo que los niveles de energía son óptimos. Mentalmente, además, lo normal es que estemos menos preocupados por los quehaceres diarios. Relajadito es más bonito...

Sin embargo, hay que tener en cuenta que la hora para el mejor sexo (05:48) variará dependiendo de la edad. Algunos investigadores recomiendan que, en la madurez, el sexo sea practicado por la noche, entre las 20:00 y las 22:30. Además de divertirte, te ayudará a dormir suavecito: la actividad sexual y el orgasmo liberan oxitocina, una hormona que puede promover un mejor descanso, sobre todo a los que viven estresados por su ‘camello’.

A partir de los 60, ya con más tiempo libre, especialmente en cuanto a los jubilados, la cosa cambia. El descanso abunda, por lo que los expertos recomiendan utilizar el sexo para “dinamizar” las tardes de los más mayores. Mucho mejor que el bingo y jugar 40.

¿Qué pasa si no tienes sexo?

No tener ‘delicioso’, por cualquier motivo, genera cambios en las mujeres. Entre los principales está el dolor a la hora de volver a tener sexo, después de un largo tiempo, baja de defensas, problemas de autoestima, estrés, ansiedad e insomnio.

- Cuando se dejan de lado las relaciones sexuales, los músculos de la pared vaginal se atrofian, puede generarse adelgazamiento de las paredes y hasta resequedad, lo que hace que cuando se vuelva a la vida sexual, se presente dolor, incomodidad o cambios hormonales.

- La actividad sexual frecuente promueve la producción de endorfinas y oxitocinas, que son neurotransmisores que fomentan la felicidad, y mejoran la salud mental, lo que mejora el estado de ánimo.

El no tener sexualidad, implica que se disminuyan los niveles de placer y felicidad, para darle cabida al estrés y la ansiedad.