Los moradores del barrio La Dolorosa, en el sur de Quito, cubrieron la sangre con césped y tierra. No querían recordar la imagen de un taxista asesinado en su propio vehículo, en la avenida Chilibulo.

(Lea también: La forma en la que asesinaron a un taxista en el sur de Quito )

El crimen sucedió a las 13:00 del 18 de noviembre. Uno de los habitantes de esta zona, caracterizada por estar rodeada de terrenos abandonados y perros callejeros, contó que escuchó tres disparos. Al salir de su casa vio que un taxi estaba encunetado.

Se acercó con otros moradores y se percataron de que el conductor tenía sangre en su ropa y no se movía. Entonces, llamaron a la Policía.

INVESTIGACIÓN

Los agentes recibieron la alerta por parte del ECU 911 que había una persona herida por arma de fuego dentro de un vehículo. Sin embargo, cuando llegaron confirmaron que la víctima no tenía signos vitales.

“Presenta un impacto de proyectil a la altura de la cabeza en la región del parietal derecho”, consta en el informe.

Los uniformados preguntaron a los testigos si la víctima era del sector, pero no hubo respuesta. Una moradora les dijo que era vecino del sector La Magdalena.

Minutos más tarde llegó un señor que se identificó como hermano de la víctima, quien se llamaba Cristhian Javier Miguez Guado y tenía 38 años. Con estos datos, los agentes revisaron en los archivos de la Policía y confirmaron que el conductor no tenía antecedentes penales.

Hipótesis

Personal de Criminalística y de la Unidad de Muertes Violentas acudieron a la escena del crimen para levantar evidencias y encontraron el indicio de una bala nueve milímetros en el interior del taxi. Además, ubicaron rasgos dactilares en la ventana posterior derecha.

Según las primeras indagaciones, la Policía descartó que el ataque habría sido producto de un robo porque encontraron todas las pertenencias de Miguez dentro del carro.

Lo que presumen, según el levantamiento de información de algunas cámaras de seguridad, es que los victimarios habrían sido los pasajeros que tomaron una carrera con la víctima. Al parecer, una persona se subió primero y durante el trayecto subieron dos más.

Casi al llegar al final de la calle Chilibulo le habrían disparado en la cabeza.

Los moradores exigen a las autoridades más control en esta zona porque hace tres meses también habrían abandonado el cuerpo de un hombre apuñalado a pocos metros de donde asesinaron a Miguez.

¿Quieres acceder a todo el contenido de calidad sin límites? ¡SUSCRÍBETE AQUÍ!