“¿Cómo están esas nalgas, muchachos?”. Con esta inusual bienvenida, el doctor Gary Guevara, de 29 años y especialista en Seguridad y Salud Ocupacional, se dirige a sus casi 70.000 seguidores en TikTok. Su motivo es claro: “Los tres primeros segundos son el enganche”, afirma.

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En el mundo virtual, Guevara es conocido como el Dr. Matasanos, un alias despectiva para los profesionales de la salud que él adopta con orgullo y humor. “Siempre me he definido como alguien divertido, jocoso y mujeriego. No, perdón, borra eso (de la entrevista)”, añade entre risas.

A pesar de que trabaja como médico independiente en Guayaquil, Guevara disfruta haciendo sátira de su propia profesión en sus redes sociales. Destaca que todo su contenido en TikTok es ‘joda’, para diferenciar al Dr. Matasanos de su faceta profesional.

En TikTok muestra desde cómo los médicos duermen en el piso durante las guardias hasta pequeños sketches sobre el trato a los pacientes. “Viene la paciente y le vas a decir: ‘Cuénteme qué es lo que siente’, y la paciente te contará toda su vida. Tú solo ‘cabecea’ como si estuvieras atento, y listo, ya está. Su tratamiento será paracetamol. Y si la paciente te mira raro por solo recetarle eso, acetaminofén”, explica en son de humor en un video.

“Lo mío es una sátira. Un poco de humor, un poco de realismo y un poco de exageración. Mi público, que está mayormente en el ámbito de la salud, entiende el humor. Por eso en mi TikTok no educo, porque la gente se puede confundir”, aclara el ‘doc’.

Y es que el Dr. Matasanos tiene un tema con las ‘nachas’. Su emprendimiento, de uniformes médicos, tiene como logo un durazno, en una clara alusión a la forma de los glúteos.

Sus clientes reciben los uniformes en cajas idénticas a las de las pizzas, generando una ola de goce. “¡No, gente, no vendo pizzas, vendo uniformes!”, exclama Guevara con gracia.

Tuvo la idea de crear este proyecto luego de que era fanático de comprar esos uniformes baratos que venden frente a su universidad. El año pasado, en plena selva donde le tocó realizar su año rural, su pantalón se rompió en la entrepierna. Pasó pena y vergüenza casi media rural. Desde allí decidió ‘meter mano’ a este negocio.

Como informó EXTRA en un reportaje de julio pasado, Ecuador enfrenta una sobrepoblación de médicos, haciendo que sea difícil para los galenos nuevos encontrar ‘camello’ en la profesión.

En Ecuador, según los datos del Ministerio de Salud, hay 38,47 galenos por cada 10.000 habitantes, cuando según la Organización Mundial de la Salud (OMS) se necesitan solo 23 médicos para esa población.

Guevara es consciente de esta situación y reconoce que muchas entidades ofrecen sueldos injustos. Por eso, prefiere buscárselas por sí solo a través de sus ‘cachuelos’ como médico independiente y con su emprendimiento de uniformes. De hambre, al menos, no perece Matasanos.

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