A Paola Rocío Mendoza Hoyos, de 38 años, la ‘huesuda’ le habría ‘coqueteado’ en diciembre del 2021. En aquella fecha, según la Policía, ella fue blanco de una tentativa de asesinato. Poco se sabe de lo sucedido hace 25 meses. No hay registro de denuncias de tal hecho o del inicio de alguna investigación.

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Tres años después, Mendoza se convirtió en objeto de un atentado y murió tras recibir varios disparos de un arma de fuego, siendo la tercera mujer víctima mortal de un hecho violento en el Distrito Manta, provincia de Manabí, en este 2024.

El ataque perpetrado al estilo sicariato en el que le quitaron la vida ocurrió la tarde del jueves 8 de febrero de 2024 en la avenida 113, a unos 200 metros del Hospital General del IESS de esta urbe porteña manabita.

En un informe policial se detalla que Paola viajaba como pasajera a bordo de un taxi. De pronto, sujetos armados que andaban en un automóvil gris descargaron varios tiros dirigidos, especialmente, a la cabeza de la víctima.

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Dos menores de edad que viajaban con ella resultaron ilesos, pero vivieron de cerca el terrible ataque. Ellos observaron cómo la mujer, bañada en sangre y agonizando, fue llevada en el mismo taxi hasta el Hospital del IESS, donde solo confirmaron su deceso.

Una fuente policial reveló que la víctima presentaba en su cabeza varias heridas por el paso de proyectiles. Esto provocó que su muerte fuera instantánea.

El ataque contra la mujer derivó en una persecución. Un patrullero que hacía recorrido por la avenida 113 se percató del hecho y los pistoleros, al ver la presencia policial, dispararon contra los agentes. Finalmente, los sospechosos del crimen abandonaron el vehículo en el que andaban en el barrio Altagracia.

Agentes especiales de Criminalística y de la Dirección de Muertes Violentas (Dinased) inspeccionaron el automotor y tomaron huellas, indicios y vestigios. La motivación del crimen de esta ama de casa aún no ha sido esclarecida por la policía.

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