La desesperación se ha transformado en pesadilla para la familia de un adolescente de 17 años que estaba desaparecido desde el 23 de enero de 2025 y fue encontrado sin vida en una fosa, en un sector de Esmeraldas.

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El menor, quien soñaba con graduarse del colegio, desapareció en un lugar que, como muchos otros, ha sido marcado por la violencia e inseguridad. Sus familiares no cesaron en su búsqueda. Recorrieron calles, hablaron con vecinos y pidieron ayuda a las autoridades.

En un sector del barrio Lucha de los Pobres, la policía halló el cuerpo enterrado en condiciones inhumanas. En el informe policial se detalla que el hallazgo se llevó a cabo a las 11:41 del 2 de febrero de 2025. Además, encontraron una moto que podría estar reportada como robada.

El estudiante anhelaba ser policía

Los investigadores comenzaron el levantamiento de información, buscando pistas que los lleven a los responsables de este atroz crimen del menor de edad

Este martes 4 de febrero, en el centro forense de Esmeraldas, los familiares del occiso enfrentaron el momento más doloroso de sus vidas: el reconocimiento del cadáver de su hijo, quien anhelaba ser policía.

Con una sonrisa contagiosa y un espíritu decidido, el joven se destacaba no solo por sus calificaciones, sino también por su compromiso con la comunidad. Él esperaba con ansias graduarse del colegio y "se esforzaba cada día soñando con ser policía, en un futuro donde pudiera servir y proteger a su gente", dijo un pariente.

Pasaba horas investigando sobre el funcionamiento de las fuerzas del orden y cómo podía contribuir a la seguridad de su barrio. Su familia y amigos lo veían como un líder en potencial, pero los sueños del joven fueron truncados de manera brutal.

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