Con la temporada invernal aún en todo su apogeo y con daños en muchos establecimientos educativos, en los cuales no se ha podido intervenir por las lluvias o por demoras en su atención, solo en Guayaquil más de 50 mil estudiantes están a punto de comenzar las clases en el período 2023-2024. A nivel del régimen Costa en total son unos 2´503.000 alumnos los que, desde este 24 de abril, volverán a las aulas.

El problema mayor se presenta en las poblaciones rurales, donde existen planteles que están inundados y por tanto no podrán recibir a los estudiantes. Desde la Unión Nacional de Educadores (UNE) se han quejado que no solo son los problemas ocasionados por las lluvias, sino que “el Gobierno no dice nada por los planteles desmantelados por la delincuencia”.

En ese marco, al menos 934 locales educativos tienen afectaciones de tipo estructural o funcional, pero el asunto podría ponerse mucho peor en caso de que el invierno siga presentándose con la fuerza que se ha venido registrando, lo cual es muy probable, de acuerdo con las previsiones de los organismos meteorológicos.

Además, queda pendiente el tema de seguridad. Ante la ola delictiva se espera que la Policía, con el apoyo de las Fuerzas Armadas, fortalezca el control fuera de los planteles.