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Buena Vida

La clave para poner límites es la educación.Archivo

A los suegros sí se les pone límites

Deja todo claro con ellos. Total, el que se casa, casa quiere.

Puedes elegir a tu pareja, pero no a sus padres. El combo ya viene incluido. Los problemas se presentan cuando ellos intervienen en la relación. Hay suegros que son controladores y quieren saber hasta el más mínimo detalle e incluso critican la manera de educar a los nietos.

En Ecuador el peso familiar es fuerte, por eso es que hay padres que se interesan por conocer el origen del futuro yerno o futura nuera.

La psicóloga Jennifer Carranza recomienda que para poner límites a los padres de tu pareja debes priorizar a tu familia. “Haz valer tu decisión de crear tu propia familia. Desde que saliste de su casa ya no perteneces a ese entorno”, dice la especialista.

El límite puede iniciar así: no permitas de que lleguen sin previo aviso. Debes ser claro y decirles: ‘es probable que no estemos’.

Por el bien de tu relación y de los tuyos establece límites fijos, estos te ayudarán a mantener una relación saludable.

(Esto también te puede interesar: Qué hacer para que ella se fije en ti)

Habla de manera pacífica

Es importante que este tema lo toques primero con tu pareja, después de esto dialoga con tus padres y tus suegros. Habla de manera calmada y firme.

Olvídate de las comparaciones

No le digas a tu pareja que tu mamá cocina mejor que ella ni viceversa. Nadie es mejor que nadie, ambas personas son importantes en tu vida.

Cuidado se inmiscuyen con los ingresos de la casa

Tampoco permitas que te ayuden a pagar la hipoteca de la casa ni las letras del carro, con esta acción se sienten con el derecho de meterse en tus decisiones financieras. Es cuestión tuya y de tu pareja si se endeudan para viajar.

No les permitas que se metan en sus problemas

Generalmente los padres se ponen a favor de los hijos, por lo tanto no pueden asesorar a la relación. Hay líos que los puedes arreglar en la noche con tu pareja, mientras que te quedas enemistado con tus suegros.

¡Precaución!

Por poner límites no eres egoísta. Tienes todo el derecho de disponer reglas en tu núcleo familiar. Rompe el estereotipo de tus padres o de tus suegros. Total, los tiempos cambian.

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