El número de mujeres que han hecho conciencia de que deben palparse continuamente sus senos para detectarse alguna anomalía en ellos va en aumento, pero esa autoexploración no es suficiente.

Una de las patologías más frecuentes, según las estadísticas que manejan entre médicos, es el cáncer de mama. Cada año, en el país, hay 3.563 nuevas pacientes y 1.056 mujeres mueren a causa de esta enfermedad.

“Este es el más frecuente de cánceres en la mujer. Primero es el de mama y después el de cuello de útero”, sostiene la ginecóloga Ximena Zurita, quien recomienda que lo más idóneo dentro de la prevención es practicarse la mamografía.

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En todo el mundo, la mamografía es el examen más importante, porque así lo demuestran los estudios que existen, acota la profesional y por ello, las damas no deben confiarse de su palpación, porque es difícil encontrarse algún nódulo.

Las mujeres deben practicárselas cuando su médico lo recomiende, pero regularmente se disponen hacerlo después de los 40 años y con una periodicidad, cada dos o tres años. Ya pasado de los 50, este examen debería ser una vez cada año o por lo menos una vez cada dos.

Hay otros estudios, como la ecografía o resonancia magnética, de la que echan mano los médicos para poder confirmar diagnósticos antes de las edades mencionadas.

La mejor forma de prevención de las células cancerígenas, de lo que hay evidencia científica, es llevando un estilo de vida saludable, no bebiendo alcohol ni fumando, pero sobre todo realizando deportes y ejercitándose.

Según la ginecóloga Zurita, hay que evitar la obesidad, el sedentarismo, incluir más frutas, vegetales, granos en las comidas y tener actividad física. Mientras más pronto, mejor.

Este cuidado se hace elemental, porque en nuestro cuerpo, y con los años más, hay oxidantes, unas sustancias que alteran el crecimiento, la multiplicación celular, la presión arterial, u otros trastornos que podrían dar paso a las diferentes dolencias.

En cambio, haciendo deportes y con una ‘buena papa’, se activan los antioxidantes, aquellas materias naturales con las que en nuestro cuerpo se puede prevenir o retrasar algún tipo de afectación a nivel de las células y consecuentemente alguna enfermedad.

La detección de una anomalía en las mamas debe ser temprana por cuanto en períodos iniciales es posible la curación.

DOLOR. Algunas mujeres consideran a la mamografía como dolorosa y si bien es un proceso incómodo, las molestias desaparecen al poco tiempo y lo fundamental es que con ella puede saber si sus mamas están sanas.

AGENTES EXTERNOS. Con respecto al cáncer de mama hay mucha desinformación, se menciona que se produce con las rasuradas, por el uso de los desodorantes, así como por ciertos sujetadores. De eso no hay evidencia científica.

IMPLANTES. Otro de los mitos en torno al cáncer en el pecho es sobre la posible influencia de la introducción de implantes en las mamas, pero expertos han explicado que no se han relacionado un mayor riesgo con su uso.

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