Sufrir de desnutrición, no realizar actividad física, consumir antiinflamatorios, carecer de vitamina D3, aquella que se produce en la piel por los rayos de sol, así como padecer enfermedades con ciertas hormonas, influyen negativamente en los huesos.

De los tipos de enfermedad metabólica ósea, la más común entre la población es la osteoporosis, que es la disminución de la densidad mineral ósea, cuando los huesos se vuelven más frágiles, con probabilidad de fractura.

Según explica el doctor Carlos Silva Vaca, especialista en endocrinología, diabetes y nutrición, una de cada 3 mujeres por encima de los 50 años podría presentar una fractura a lo largo de su vida.

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Pero esta dolencia no es exclusiva para mujeres, también la pueden padecer los hombres, por efecto de las hormonas. Entonces, independientemente de la edad y género, la población debe adoptar medidas a largo plazo para no padecer por esta patología que limita su capacidad de desplazarse.

“La desnutrición es una causa de osteoporosis”, precisa el médico, por ello las personas deben llevar una dieta equilibrada, desde jóvenes.

En sus comidas deben servirse alimentos ricos en calcio como la leche (un vaso al día) y para quienes no toleran este producto hay otros como la leche de almendras y de soya.

El ajonjolí, sémola y algunos vegetales como espinaca, brócoli, acelgas, también le proveen de calcio, así como suplementos y alimentos fortificados. También es importante comer pocas grasas y no demasiados carbohidratos.

La falta de estrógenos en las mujeres después de la menopausia, cuando finaliza la edad reproductiva, también es un factor de riesgo, porque esta hormona, a más que dar las características sexuales secundarias femeninas (senos, vello), otras de sus funciones es proteger los huesos.

Cuando una mujer pierde los estrógenos, su sistema óseo queda desprotegido. No es algo que ocurre de forma inmediata, sino progresivamente, como en un período de diez años, refiere el especialista.

Y en los hombres ocurre algo similar con la falta de la hormona testosterona, la cual además de influir en la sexualidad, también es importante para la salud de su esqueleto.

Hay enfermedades como el hipertiroidismo (cuando la tiroides funciona mucho), el cual hace que se produzcan más hormonas, que llevaría a la descalcificación de los huesos. Lo mismo sucede con el hiperparatiroidismo primario.

La vitamina D3 es importante para tener huesos sanos. De 10 a 15 minutos de exposición al sol, con protección, obviamente, hace que se active aquella sustancia necesaria para el organismo.

Y en este aspecto, según precisa el endocrinólogo, hay que poner mucho énfasis, porque se creía que Ecuador, por encontrarse en latitud 0, país sobre el cual los rayos del sol caen perpendicularmente, nadie va a estar falto de vitamina D, pero no es así.

Hace ocho años, unos médicos realizaron un estudio en el cual detectaron que un alto número de personas carece de esta vitamina, incluso, entre los habitantes de nuestra Costa.

No basta con tomar sol, alimentarse bien, ingerir suplementos, también debe hacer ejercicios como caminatas a paso ligero; usar mancuernas para darle movimiento a los músculos; pararse y sentarse, u otros ejercicios que le ayudarán a tener una buena salud ósea. La práctica debe ser de manera regular.

Tener cuidado con ciertos medicamentos, como algunos antiinflamatorios que ingeridos por mucho tiempo pueden descalcificar los huesos. (IC)

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