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Buena Vida
¿Cómo se deben dividir los gastos en una pareja?: Un economista lo aclara
Si uno gana más que el otro, el economista sugiere repartir gastos 60-40 o 70-30, aunque recalca que lo primordial es el acuerdo en común
¡Ay, el amor…! Esa mezcla de mariposas en el estómago y, para ser sinceros, los nervios cuando llegan los recibos a fin de mes. Porque si hay algo que pone a prueba cualquier relación, no es la suegra ni la ex: es el dinero.
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Entonces, ¿cuentas compartidas o cada quien por su lado? Una reciente investigación de la Revista de Personalidad y Psicología Social asegura que unir fuerzas -y deudas- podría ser el secreto para la felicidad de pareja. Pero ojo, no es solo cuestión de abrir una cuenta compartida y listo.
Más de 1.000 parejas casadas participaron en este estudio, y los resultados fueron claros: quienes manejan sus finanzas como un equipo reportaron mayores niveles de felicidad y satisfacción. Sí, parece que la verdadera prueba de amor no es compartir el control remoto, sino la clave de tu cuenta bancaria.
Pero no todo es tan sencillo, como señala el máster en Economía, Mauricio Pozo (@Mauriciopozoec): “Lo importante no es si la cuenta bancaria es compartida o individual, sino el acuerdo sobre cómo se utilizan los recursos”.
Según Pozo, una relación financiera saludable requiere más que sumar los ingresos de ambos. Es un acto de equilibrio, donde se optimizan los recursos y se establecen prioridades. Por ejemplo, si uno cubre los gastos de alimentación y el otro se encarga de seguros y vivienda, se podría encontrar una fórmula como 60-40 o 70-30.
¿Cómo se deben llevar las finanzas en pareja?
“Lo esencial es que ambos cedan un poco y lleguen a acuerdos, porque aquí no hay espacio para competir sobre quién gana más o quién paga menos”, aconseja el exministro de Economía (2020-2021).
Pozo subraya que, antes de formalizar una relación, es vital poner las cartas sobre la mesa: “Hay que decir, ‘estas son mis deudas y estos mis activos’, y la otra persona debe estar de acuerdo”. Porque si no hay confianza ni transparencia, olvídate de planear una boda.
Al final, compartir las cuentas puede parecer aterrador, pero también es una oportunidad para reforzar el compromiso. Porque, como bien dice Pozo, “el dinero es un instrumento; lo importante es el acuerdo”.
Consejos prácticos para que el dinero no mate al amor
- Ojo antes del "sí, acepto": Si no puedes hablar de tus deudas y ahorros con tu pareja, ¿cómo vas a planear una vida juntos? Pongan todo sobre la mesa: desde ese crédito que odias hasta los ahorros para las vacaciones soñadas.
- ¡A repartir!: Lo importante no es quién pone más, sino que ambos aporten de manera justa según sus posibilidades. Si uno gana más, que ponga más, pero con respeto. Aquí no hay lugar para frases como “es que yo pago todo” o “tú no aportas nada”. El amor no compite, coopera.
- El presupuesto es tu pana: Hagan un presupuesto conjunto que contemple lo esencial, lo deseado y hasta lo inesperado (sí, esas cervezas sorpresa con los amigos también cuentan). Usen apps de finanzas.
- Cita financiera: Una vez al mes, revisen juntos cómo están sus gastos, qué ajustes necesitan hacer y, por qué no, celebren si han cumplido sus metas.
- Acuerdos = la base del amor eterno: Si uno es ahorrador y el otro derrochador, el choque será inevitable. Acuerden límites, como un tope para gastos individuales o un porcentaje destinado a ahorros conjuntos.
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