Hay ocasiones en que los gatos recién nacidos son echados a la basura por quienes no los desean dentro de sus casas, aunque también ocurre que sus madres abandonan la camada y los pequeños felinos mueren ante la falta del cuidado materno o se convierten en presas fáciles de depredadores.

Socorrer a los gatitos recién nacidos más allá de ser un acto de compasión es una gran responsabilidad. Si has decidido adoptar alguno en estas condiciones y no conoces los cuidados necesarios para su desarrollo, el veterinario Diego Salinas te da las siguientes pautas.

1. Los primeros días

Los primeros días de nacido son primordiales para el felino. Si lo hallaste húmedo, no pierdas tiempo y sécalo lo más pronto con un secador de pelo, en el nivel más bajo y no tan cerca para evitar quemarlo. El calor es necesario, ya que estimula el sistema cardiorrespiratorio, controla la temperatura y el metabolismo.

2. Alimentación

Con un biberón exclusivo para mascotas recién nacidas o con una jeringuilla de insulina aliméntalo con leche de fórmula especial que venden en los locales. Prepárala con un poquito de agua tibia (debe estar a 38 grados) y dásela para que succione de a poquito. 

El gatito debe lactar como si lo hiciera con su madre. Las patitas deben estar en el piso y la cabeza erguida. En la primera semana de vida los gatos comen cada 2 o 4 horas, incluidas las noches. A medida que crecen las tomas se van espaciando.

3. Aseo

Al no estar la madre, encargada de acicalarlo para mantenerlo limpio, es necesario que al recién nacido se lo asee con toallitas o pañitos humedecidos con un poquito de alcohol para evitar la aparición de hongos. Siempre deberá estar seco, porque la hipotermia lo puede matar. 

Asimismo, después de alimentarlo es importante estimular su área anogenital con un pañito húmedo para que haga sus necesidades. Los gatos suelen defecar dos veces al día, pero si pasan más de un día sin evacuar, lo mejor es acudir al veterinario. Aunque el estreñimiento es un problema frecuente en los felinos, en gatos pequeños es mortal.

4. Lugar cálido

El lugar donde lo vayas a dejar debe ser cálido (entre los 29 y 32 grados), así evitarás que sufra de frío. Para lograr la temperatura correcta, dentro de la camita ponle bolsas de agua caliente enrolladas en mantas o sino enciende sobre su lugar de descanso, un foco amarillo, de los que se usan para las aves. En la cuarta semana debes bajar la temperatura hasta llegar a los 23 grados.

5. Destete

Entre la semana 3 y la 8 a los gatos les aparecen los primeros dientes, lo que le permitirá consumir alimentos sólidos. Combina esa rutina con la ingesta del biberón. A los dos meses, el gatito está listo para el destete definitivo. Es el momento de reducir la leche y darle más alimento sólido, según su edad.

6. Vacunas

Una vez que ha dejado los biberones es tiempo de llevarlo donde el veterinario para que inicie el programa de desparasitación y vacunas.