Exclusivo
Actualidad
"Ya no soy el taxista vulgar", dice el popular 'tres garrotazos'
Con humor sano, Franklin López deja atrás el pasado. Actualmente realiza videos cómicos para redes sociales, pero evita darles el toque 'picante'
En redes sociales, Franklin José López García aún provoca risas con sus ocurrencias como hace siete años, cuando se difundió un audio en el que presumía haber ‘pegado’ tres ‘garrotazos’, es decir, haber tenido relaciones sexuales en tres ocasiones seguidas. Pero pocos saben lo que atravesó al vincularse al humor.
Al recordar cómo cambió su vida por esa grabación y pasó del volante de su taxi a la realización de videos cómicos, casi siempre sonríe. Pero en una parte de su relato se pone serio. Antes de seguir, cita una clásica reflexión: “Todo en la vida tiene su precio”. Y continúa...
“Hay personas que no lo saben, pero yo perdí mi hogar, mis hijos. Tengo siete años sin ellos, los veo muy de vez en cuando”, revela.
La anécdota sexual y extramarital que contó en la nota de voz hizo gozar a muchos, pero significó el fin de un matrimonio de 23 años con la madre de sus tres hijos. Más de la mitad de sus 40 años de existencia.
En esa época, él le pidió perdón e intentó que siguieran juntos. Pero no. Ella se mantuvo firme en su decisión de separarse.
Fue el momento más duro de su vida. Tuvo que arreglárselas como sea después de quedarse sin hogar.
“Viví como 20 días en mi carro, lo estacionaba en las gasolineras para dormir. La poca ropa que pude sacar de mi casa la dejé donde mi hermana. Luego reuní dinero y logré alquilar un departamento”, recuerda.
La difusión del audio fue a sus espaldas. Insiste en que él nunca lo planeó. Solo estaba chateando con un colega del taxismo sobre su peculiar experiencia y ese supuesto ‘pana’ fue quien lo divulgó en varios grupos. De ahí, el archivo pasó incontrolablemente a la ciudadanía.
OTRA OPORTUNIDAD
Franklin dejó todo atrás. Superó esa ‘fregada’ etapa y, con el tiempo, el amor tocó de nuevo su puerta. Tiene una nueva pareja con quien la relación marcha bien, al menos hasta ahora.
La conoció hace dos años en una fiesta. Tienen amigos en común, ese fue el ‘enganche’. Lo curioso es que cuando empezaron a salir, ella no sabía que él era el de los tres ‘garrotazos’. Entonces, para que no haya sorpresas luego decidió contarle.
“Yo le hablé de mi historia y ella me dijo que no tenía ningún problema con eso, que ella no tenía nada que ver con mi pasado y me entendió”, dice.
En lo laboral, hace un año y medio ya no realiza carreras en su ‘nave’. Se dedica a grabar contenido humorístico y publicita marcas o productos. Se ha juntado con ‘youtubers’ e ‘influencers’ para elaborar producciones y hasta tiene su propio representante artístico.
Inicialmente no pensó incursionar en ese ámbito. Cuando se hizo conocido subía uno que otro video chistoso, pero seguía ‘taxeando’. Así se mantuvo hasta que le robaron su cuenta de Instagram. Eso lo ‘bajoneó’, por lo que dejó de publicar.
“Me decían que no dejara el humor, porque yo ya lo tenía abandonado. Luego, comencé desde cero con otra cuenta y ha sido duro, pero el público no me ha olvidado, sigue apoyándome”, refiere.
Franklin se describe como una persona alegre, con ‘chispa’ y humildad. Está enfocado en darse a conocer de otra forma, dejando a un lado esa fama del taxista machista y vacilón. Quiere demostrar que puede hacer comedia no tan ‘picante’.
“Lo de los tres ‘garrotazos’ nunca se va a olvidar, es como algo icónico del ‘guayaco’. Pero estoy tratando de limpiar eso porque la gente no conocía al ser humano que hay detrás. No quiero que me tomen como el vulgar, eso ya quedó en el pasado”, explica.
En la calle lo reconocen y lo saludan. Él corresponde a ese afecto y pide sabiduría al Creador para continuar con su contenido.