Desde las 08:00, los candidatos empezaron a ‘desfilar’ por los recintos electorales para ejercer su derecho al voto. La mayoría cumplió con los horarios establecidos, aunque Jorge Yunda lo hizo dos horas antes de lo anunciado.

El candidato y alcalde removido de la capital llegó poco antes de las 09:00 a la escuela General Artigas, ubicada en San Roque, con un gato y su perro Zeus. Durante los minutos que le tomó votar, los dejó ‘parqueados’ junto a él.

“Estoy optimista de haber hecho una campaña limpia, de haber dado propuestas, de no haber insultado”, dijo al salir del recinto electoral.

Por su parte Pedro José Freile, otro de los postulantes, acudió a la Junta 17 del Colegio Técnico Salesiano Don Bosco.

Aunque el proselitismo político estaba prohibido, hubo simpatizantes que lo acompañaron y lo aplaudieron a su salida de la junta.

Fue optimista sobre los resultados, por el trabajo que ha llevado a cabo “con mucha tenacidad” y agradeció a todos los que participaron de la alianza. “Yo siento, además, la expectativa de tener esta tarde, Dios mediante, el apoyo de la gente”.

Esa confianza fue la tónica de los candidatos en la jornada electoral. Todos estaban casi seguros de que serían los ganadores.

Al otro lado de la ciudad, el aspirante por el correísmo, Pabel Muñoz, llegó pasadas las 08:20 a la escuela Costa Rica, ubicada en la parroquia Nayón, nororiente de Quito.

Él llegó en compañía de su esposa y otros simpatizantes. Después de depositar las ocho papeletas en las ánforas, enfatizó que se sentía ilusionado por los resultados.

“El cariño que hemos recibido las últimas semanas ha sido increíble. Tenemos la expectativa de que podamos darnos un gran abrazo de triunfo a partir de las 17:00”, agregó Muñoz.

Se pronunció también sobre el atentado del que fue víctima un candidato a alcalde de Puerto López, Manabí. “Ecuador tiene que parar este desangre y volver a ser la isla de paz que siempre fue. No puede ser que nos encaminemos a ser ese tipo de países. Mi pesar con la familia del candidato”, expresó.

Además, un optimista Diego Páez llegó al Colegio Sagrados Corazones de Rumipamba. Allí dijo que los quiteños han tenido tiempo suficiente para meditar su voto.

“Hoy es un día especial para la ciudad. Doce años de abandono, de descuido de nuestra capital, hacen que la gente reaccione y que ahora diga: ‘bueno, no más de lo mismo’”, aseveró.

En total, doce postulantes participaron por el sillón municipal. Uno de ellos, Omar Cevallos, días antes de los comicios decidió retirarse, para darle su apoyo a Freile. Aun así, su rostro ya había sido impreso en las papeletas. 

CANDIDATOS A PREFECTOS

La candidata Paola Pabón, quien buscaba su reelección como prefecta de Pichincha, fue a sufragar con un séquito de simpatizantes y luciendo un look deportivo. La abogada se mostró consternada por el crimen de un candidato a alcalde en Manabí. “Nunca hemos vivido una ola de violencia en un proceso electoral”, comentó. También se abrazó con algunos de sus seguidores.

Guillermo Churuchumbi, candidato a la Prefectura de Pichincha, llegó con una gran comitiva a sufragar en Cayambe. Parecía un actor de cine rodeado de fanáticas, quienes lo alentaban para ganar dicha dignidad.