Luego de la masacre ocurrida en Solanda, sur de Quito, la noche del domingo 18 de agosto de 2024, en la que tres personas murieron y otras dos resultaron heridas, la Policía Nacional del Ecuador ha reaccionado para evitar que un nuevo hecho similar ocurra en la zona, sobre todo porque ya existían alertas del incremento de violencia en este icónico sector: hubo dos ataques violentos previos. 

La noche del miércoles 21 de agosto, se registró un gran despliegue de uniformados en esta barriada, con mayor presencia en la calle donde se han suscitado los últimos casos: la José María Alemán, conocida popularmente como la J. Este sitio es referente del comercio, la comida callejera y la vida nocturna, pues es un bulevar que cuenta con gran variedad de negocios de alimentos, ropa y productos varios. 

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De la misma forma, debido a la gran afluencia que existe, también existirían ciertos comerciantes informales que, con la fachada de vender cigarrillos, en realidad se dedicarían al comercio y distribución de sustancias estupefacientes, según confirmó el comandante del Distrito Metropolitano de Quito (DMQ), o Zona 9, general Wilson Pabón, quien acudió al sitio para coordinar las acciones que se realizarían, en respuesta a la situación que atraviesa Solanda. 

En sus declaraciones a Radio Vigía, medio de comunicación institucional de la Policía Nacional del Ecuador, el comandante Wilson Pabón expuso que el principal problema de Solanda, icónico sector del sur de Quito, sería el microtráfico de drogas, pero no es el único, porque también mencionó que hay problemas interpersonales que han llevado a riñas, con cuchillos e incluso con armas de fuego. 

El comandante Wilson Pabón ha precisado que "estos problemas que estamos viendo, los estamos atendiendo con una visión más global, interviniendo en otras provincias y Quito no va a ser la excepción. De hecho, como resultado de estos trabajos, con el eje investigativo se han desarticulado algunas organizaciones delictivas violentas y hemos colocado a órdenes de autoridad competente". 

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El general ha enfatizado que "todos los actores estamos aquí interviniendo: la Policía Nacional, con el equipo motorizado, que tiene facilidad de desplazamiento, y el equipo Linces G3. Tenemos aquí la fuerza de choque que la Policía Nacional necesita usar: el uso legítimo de la fuerza para todos aquellos violentos, los cuales quieren sembrar la zozobra y esto no lo vamos a permitir. Vamos a ser contundentes". 

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