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Luto múltiple en tres provincias del país por accidentes de tránsito
A tres días de haberse iniciado el nuevo año, se suscitaron percances que entristecieron y enlutaron a familias en Santo Domingo, Azuay y Guayas
No se conocen, pero atraviesan una misma pena y dolor a causa de la ‘huesuda’. Y es que tres familias quedaron desmembradas tras perder a las cabezas del hogar junto con sus hijos en diferentes accidentes de tránsito. Uno ocurrió en Santo Domingo de los Tsáchilas, otro en Azuay y el último en Guayas.
En el primero falleció una familia completa: papá, mamá e hija. En el segundo, un ciudadano junto con sus tres hijas menores, mientras que su esposa y otro niño quedaron heridos. Y en el tercer hecho perecieron una madre y su hijo al caerles una pared tras el impacto de una volqueta con una parada de bus.
Visita frustrada
En un abrir y cerrar de ojos la ‘pelona’ le puso fin a toda una familia. Los esposos Daniel Saltos y María Sesme, de 36 y 28 años, junto a su hijita de 4, que se movilizaban en una motocicleta, fallecieron al instante tras chocar frontalmente con una volqueta.
La tragedia ocurrió en el recinto La Florida, en el kilómetro 7 de la vía San Miguel de Los Bancos (Pichincha) - Valle Hermoso (Santo Domingo de los Tsáchilas), aproximadamente a las 09:00 del domingo 3 de enero.
En el sector los habitantes manifestaron que nadie vio cómo ocurrió el choque, pero sí escucharon un fuerte estruendo. Cuando salieron y fueron hacia la carretera, se percataron de que en la vía yacían tres cadáveres, junto a la moto en la que se desplazaban, además de una volqueta abandonada.
De inmediato comunicaron la emergencia a las autoridades, que despacharon una ambulancia. Sin embargo, al llegar los paramédicos solo confirmaron el deceso de las tres personas.
Agentes policiales hicieron el levantamiento de indicios para el esclarecimiento del caso.
La escena fue traumática y dolorosa para quienes reconocieron a las víctimas, pues estos concursaban en un campeonato de fútbol de la misma zona. Los calificaron como una familia amable y participativa, por lo que les causaba mucha tristeza su final.
Los cadáveres fueron llevados al centro forense de Santo Domingo para las autopsias de ley. A la morgue acudieron Jorge y Luis Sesme, padre y hermano de María. Ellos se mostraron consternados por la tragedia y manifestaron que sus allegados salieron de su domicilio, en el noroccidente de Pichincha, con destino a Nuevo Israel, recinto de Santo Domingo de los Tsáchilas, para visitar a la hija mayor de María, que había procreado en su primer compromiso.
La familia sería velada y sepultada en La Florida, donde sus miembros residían y se desempeñaban como agricultores.
Retorno fatal
Reducido a chatarra y con la parte frontal destruida por completo quedó un auto Sail de placa PBZ-2524, en el que viajaban seis miembros de una familia. El vehículo se impactó con un bus de transporte intercantonal.
En el hecho, el padre, de 46 años y quien conducía el auto, y sus tres hijas menores de edad perdieron la vida.
La esposa, de 40 años, y el hijo mayor, de 17, se salvaron milagrosamente, pero resultaron heridos. La mujer sufrió una fractura de fémur y pierna izquierda y se halla asilada en el hospital José Carrasco Arteaga (del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social), mientras que el joven se recupera de politraumatismos graves en el hospital Vicente Corral Moscoso.
El siniestro ocurrió a las 18:00 del domingo en la Y de Tarqui, kilómetro 12 de la vía Cuenca-Girón-Pasaje, sur de Cuenca.
Según el testimonio del bombero Fernando Quito, el conductor del auto quedó atrapado en los fierros. Las otras víctimas, sus tres hijas de entre 3 y 10 años, viajaban en el lado izquierdo del asiento posterior. La mujer estaba sentada al lado de su cónyuge y el joven iba detrás del asiento del copiloto.
Las víctimas retornaban a Cuenca luego de un paseo familiar que tuvieron en el cantón Santa Isabel. Los cadáveres fueron llevados al Centro Forense de Cuenca.
La emergencia fue atendida con recursos del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), Ministerio de Salud Pública, Cuerpo de Bomberos de Cuenca y Comisión de Tránsito del Ecuador.
De acuerdo con los datos preliminares de los agentes de la Oficina de Investigación de Accidentes de Tránsito, se presume que hubo exceso de velocidad de los dos vehículos, y que uno de ellos habría invadido el carril contrario.
El chofer del bus de la Cooperativa Girón abandonó el lugar, dejando a los pasajeros dentro de la unidad, afirmó un agente de tránsito.
Sepultados
Mayra Alejandra Bermeo, de 36 años, y su hijo Joe Jareb Alvarado, de 7, fallecieron en una parada de bus, mientras esperaban un taxi en el recinto Pueblo Nuevo, cerca de El Triunfo, en la provincia del Guayas.
Al parecer, una volqueta color amarillo impactó contra la parte posterior de la estructura del lugar y el concreto cayó sobre la madre y su hijo, a quienes aplastó. Ella estaba también junto a su hija de 8 años, que sufrió afectaciones leves, y otro niño de 13, que se salvó al distanciarse por un momento del sitio para hacer una necesidad.
La angustia y el pánico se apoderaron de los moradores, quienes con gran esfuerzo sacaron de entre los escombros a la mujer y la trasladaron a un centro se salud; mientras el padre de los menores, que llegó a los pocos minutos a la escena de la desgracia, trataba de socorrer al niño y retirar parte del concreto que estaba sobre su cuerpo.
En el Hospital Básico El Triunfo los médicos reportaron luego el deceso de la madre. Su hijo falleció en el Hospital Darío Machuca Palacios, de La Troncal.