Se inició una instrucción fiscal por 30 días en contra de Armando Aguas, sospechoso de secuestrar un bus en Ibarra, Imbabura.

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En el procedimiento se conocieron nuevos detalles de cómo se registraron los hechos que alarmaron a los imbabureños, la noche del 27 de mayo. Según un informe al que EXTRA accedió, se detalla que al menos 15 personas estaban a bordo del bus tomado por Aguas.

Para negociar con el hombre se requirió la ayuda de un cabo del Grupo de Operaciones Motorizadas (GOM). A su arribo al bus, Aguas estaba furioso y amenazaba con matar a los pasajeros, usando el cuchillo con el que se había armado.

“Si intentan bajarse del bus, los voy a matar. Que no se acerquen los policías porque aquí nos morimos todos”, gritaba. Pero el agente logró liberar, poco a poco, a cada usuario, entre ellos niños, mujeres y adultos mayores.

Fue en ese momento que no tuvo alternativa y usó un arma de descarga eléctrica. Al primer disparo, Aguas no fue neutralizado y se le hizo una segunda descarga. Así pudo ser detenido y desarmado. Ahora esperará en prisión el desarrollo de las investigaciones.

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