SUSCRIBIRME POR $1/ 1 MES

Exclusivo
Actualidad

En Guayaquil, ni los ‘pelados’ estudian en paz

El ataque a bala a menores de edad afuera de un colegio alarmó a los padres de familia. Los representantes corrieron al plantel para retirar a sus chicos. Uno de los heridos estudia en la institución y conversaba con un amigo.

Padres de familia llegaron al plantel para retirar a sus hijos y llevarlos a casa. Estaban angustiados.
Padres de familia llegaron al plantel para retirar a sus hijos y llevarlos a casa. Estaban angustiados.CARLOS KLINGER

Hasta su casa, ubicada a cuatro cuadras del colegio donde estudian sus dos hijos, Leonela Cuenca escuchó los disparos que les propinaron a dos jóvenes que estaban parados afuera de la unidad educativa.

Uno de los heridos es estudiante de este plantel y estaba conversando con un amigo cuando fueron atacados por dos sujetos en motocicleta. Ocurrió a las 10:00 de ayer en los exteriores de un establecimiento educativo ubicado en la cooperativa Carlos Magno, en el sector de la Juan Montalvo, en el norte de Guayaquil.

La violencia es el pan de cada día en los colegios. Para quienes estudian en la tarde es peor. Debería existir más control de la Policía”.
Leonela Cuenca, madre de familia

Asustada la madre de familia abandonó su hogar y sus quehaceres domésticos y corriendo se dirigió el colegio para constatar que sus hijos, quienes cursan el noveno de básica y el tercer año de bachillerato, no hayan sido víctimas de una bala perdida.

Los heridos fueron llevados en ambulancia a una casa de salud.
Los heridos fueron llevados en ambulancia a una casa de salud.CARLOS KLINGER

“Nos enteramos por el chat de padres de familia. La profesora escribió que nos acercáramos al colegio porque había ocurrido una balacera. Ya no se puede estar tranquilo, hasta cuando nuestros niños están en clases vivimos en zozobra”, comentó la señora, mientras desesperada esperaba que le abrieran la puerta del colegio para llevarse a su vástago.

Pierina, otra madre de familia que no quiso dar su apellido por temor a represalias, comentó que el miedo se apodera de los progenitores porque los alumnos son tentados por microtraficantes, quienes deambulan por los exteriores de la institución. “En la noche del martes hubo una balacera y el domingo le dispararon a un chico. Este sector se ha vuelto peligroso”, aseguró.

En el lugar agentes de Criminalística recogieron 6 indicios balísticos.
En el lugar agentes de Criminalística recogieron 6 indicios balísticos.CARLOS KLINGER

Un testigo comentó que los chicos fueron atacados por usureros, quienes prestan dinero a moradores del sector. “A los prestamistas les robaron y al ver a los muchachos en la esquina pensaron que eran ellos. Les dispararon en las piernas. Gracias a Dios no fue de gravedad”, manifestó el lugareño.