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Elecciones Ecuador 2023: El pueblo votó por un país más seguro
Quiteños y guayaquileños madrugaron para sufragar. Los controles de seguridad fueron molestosos, pero necesarios para una jornada en calma
Los ecuatorianos desayunaron ‘tuqueado’ antes de salir a ejercer su derecho al voto por la segunda vuelta electoral en la que los candidatos Luisa González, de la Revolución Ciudadana; y Daniel Noboa, de la alianza ADN, buscaban la presidencia de la República.
Algunos, como Jacqueline Sánchez, se prepararon un batido reforzado de fruta con avena Quaker porque, según ella, este alimento brinda energía y “ayudará a tomar la mejor decisión”.
(Le invitamos a leer: Ciudadanos, molestos porque tocó votar tres veces este año)
Para la quiteña, lo que espera del nuevo presidente es que resuelva el tema de la inseguridad. Hace dos días le robaron cuatro delincuentes con cuchillo en el bus que viajaba.
Sin embargo, también hubo personas, como Rosa Guerrero, quienes decidieron tomarse un vasito de hierba luisa bien calientito con un sánduche de jamón antes de sufragar.
Ella llegó desde la provincia del Azuay hasta Chillogallo, en el sur de Quito, y comentó que el brebaje le ayudó a decidir bien a qué candidato le dio su voto. “La hierba luisa es una planta que alivia enfermedades y otros males. Eso necesitamos para el país”.
Otros ciudadanos prefirieron desayunar modestamente y solo tomaron una tacita de café. Ese fue el caso de Sandy Flores, quien indicó que no confiaba en ninguno de los candidatos y que le daba igual quien ganara.
Ella y su prima fueron a sufragar porque necesitaban obtener la papeleta de votación para realizar unos papeleos y no ser sancionadas.
En la capital votaron más de 2 millones 300 mil ‘chullitas’ de los cuales muchos pedían que el nuevo mandatario se preocupe por temas de seguridad, educación, salud y empleo.
Jorge, un vendedor de jugos, ofrecía su producto afuera de un colegio del sur capitalino. Llegó desde Machachi junto a su familia para ganar un poco de dinero y aseguró que el candidato que llegue a ocupar la silla de Carondelet debe generar políticas para crear empleo.
Su hija se quedó sin trabajo hace tres meses y él la mantiene temporalmente a ella y sus dos nietos, quienes ayudaban a pasar los vasos de jugo a los clientes. “A mí no me importa la avena ni la hierba luisa, con vender mi jugo de coco quedo satisfecho”.
Guayaquil madrugó para evitar el mal clima
En el Puerto Principal, los votantes hicieron fila antes de las 07:00 para poder ingresar a los recintos electorales, pues sabían que el operativo de seguridad en la entrada de los centros de sufragio les iba a quitar algo de tiempo y el clima en las horas de la tarde iba a estar todo menos amigable.
Isabel Ronquillo, quien acompañó a un familiar al recinto del colegio Provincia de Bolívar, donde sufragó el alcalde Aquiles Álvarez, afirmó que en su caso no le hacía “ni al Quaker ni a la hierba luisa, me voy por el bolón de chicharrón, como buena guayaca”.
Ronquillo considera que la prioridad del nuevo presidente será resolver la inseguridad, aunque es consciente que “no es algo que se pueda solucionar en tan poco tiempo de gobierno, pero que sí debe ser el tema más importante, a abordarse desde el primer día”.
Nathaly Zúñiga, quien sufragó en la Unidad Educativa Carlos Julio Arosemena Tola, en la parroquia Pascuales, aseguró que “sí me pegué un buen Quaker para venir con fuerzas y buena voluntad para elegir a mi nuevo presidente”.
Para ella, parte importante de la solución al problema de la inseguridad pasa por hacerle frente al narcotráfico, que tiene tomados los puertos y fronteras nacionales.
“Obviamente no se va a poder solucionar de la noche a la mañana, pero al menos se puede dejar hecho un plan de acción para hacer frente, a mediano plazo, al problema de las drogas”.
EL EXPERTO: “Hay que hacerse cargo sin tantas lamentaciones”
“Más que pensar en lo que podría hacer, el nuevo presidente debe asumir el Estado con toda su potencia, especialmente en materia de seguridad, porque no hay tiempo para lloriqueos ni ineptitudes.
El país está al borde de su desintegración, es su crisis más grande de inseguridad y corresponde al presidente de la República hacerse cargo sin tantas lamentaciones ni buscar culpables.
Con el actual marco jurídico se obtuvieron las cifras más exitosas en materia de seguridad hasta el año 2017. Con el mismo marco estamos viviendo nuestra etapa más insegura; entonces, estoy de acuerdo en que hay que actualizar las leyes, pero creo que el gran problema medular es el abandono desde el Estado, al cual hay que recuperar.
El de Lasso ha sido un Estado parapléjico, débil, sin norte, sin liderazgo y corrupto. En resumen, la solución pasa por la aplicación de la ley y que el Ejecutivo asuma su rol.
Hay que tener claro que si Luisa González gana la presidencia la tendría más fácil, pues el correísmo tiene más estructura, un bloque legislativo más grande, que seguramente se va a ampliar con las elecciones en el extranjero. Tiene una base política más consolidada, las alcaldías más grandes y experiencia pública.
Daniel Noboa es la esposa, la mamá, la tía y un partido que tomó prestado, por decirlo que alguna manera; así que sí, efectivamente a Noboa le va a costar más tiempo formar alianzas políticas y juntarse con las personas con la experiencia necesaria para lograr un cambio y que esto no sea la prolongación de la catástrofe que Lasso deja en el país”.
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