“Bien hecho, bien hecho”, son las palabras que se escucha de una mujer mientras en una grabación de observa a un hombre que somete a otro a punta de puñetes, en plena proyección de la película de Garfield en una sala de cine en León, España.

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El hombre que le sacó ‘la chicha’ al otro sujeto no es nada menos que un boxeador, Antonio Barrul. De pronto, en la sala un sujeto comenzó a mostrar una actitud violenta hacia su pareja. La situación escaló cuando, después de media hora de película, el individuo se levantó y agarró a la mujer del cuello, llegando a golpear a una niña en el forcejeo.

“Me levanté y le dije que se vaya, que esto no pueden ver los niños, porque les afecta”, explicó Barrul. Sin embargo, la reacción del individuo fue de furia, lanzándose contra él con insultos y amenazas. A pesar de los intentos de su esposa e hija por calmar las ‘aguas’, el individuo continuó alterando la tranquilidad de la sala, ‘toreando’ a Barrul.

Pero el sujeto no contaba con que este es boxeador profesional. Motivado por su repudio hacia la violencia de género, actuó: “Porque a un maltratador no hay que dejarle excederse en ningún momento, estoy en contra de la violencia de género al 100 por ciento y esto no se puede consentir”, sentenció.

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Luego del suceso, Barrul pidió disculpas públicamente a la audiencia en el cine y aseguró que la violencia nunca es aceptable, pero alegó que el sujeto estaba golpeando a la mujer e hija y que no pudo contenerse. Ahora él podría perder su licencia profesional para boxear.

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