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Tres de las víctimas murieron en el lugar, mientras que una falleció en una casa de salud.Alex Lima y cortesía

Las cuatro víctimas mortales del ataque armado en la Martha de Roldós: ¿Qué hacían?

Los criminales habrían llegado a pie. En el lugar se recogieron más de 30 indicios balísticos

Los asesinos de cuatro ciudadanos que trabajaban como mecánicos en un taller ubicado en la cooperativa 26 de Febrero, en el sector de Mapasingue Este, al norte de Guayaquil, llegaron caminando al lugar. Apuntaron directamente a sus objetivos, los obligaron a correr y luego les dispararon.

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Este violento hecho ocurrió la tarde del miércoles 8 de enero. Las víctimas mortales fueron identificadas como Bolívar Gardel Castro Barzola, Jefferson Moisés Rivas Constante, Jorge Álex Reyes Leones y Vicente Alejandro Balderrama Mendoza. Ninguno de ellos registraba antecedentes penales.

Una fuente policial reveló que los fallecidos, al parecer, habían sido víctimas de amenazas previas.

“Según versiones de moradores que prefirieron no identificarse por temor a represalias, personas desconocidas llegaron al taller mecánico ubicado en el lugar de los hechos y abrieron fuego contra las víctimas. Tras cometer el ataque, los agresores huyeron con rumbo desconocido”, indicó el investigador.

Los cuerpos quedaron sobre la calzada.ALEX LIMA

Tres de las víctimas fallecieron en el lugar del ataque, mientras que Balderrama murió en la casa de salud a la que fue trasladado en ambulancia para recibir atención médica.

El hecho ocurrió en un sector que forma parte del distrito Florida, el cual ya registraba (hasta el cierre de esta edición) diez asesinatos entre el 1 y el 9 de enero. En el lugar del suceso, agentes de Criminalística recolectaron 23 vainas percutidas de calibre 9 milímetros, una bala deformada y tres proyectiles completos.

Otros hechos de sangre

A las 21:00, en la cooperativa Unión de Bananeros, Guasmo Sur de Guayaquil, sicarios acabaron con la vida de Darwin Salas Alvarado, de 44 años.

La víctima tenía 11 procesos judiciales por delitos como robo, tenencia de armas, posesión de droga y tráfico de estupefacientes. Sus atacantes le propinaron ocho disparos, por lo que su cuerpo quedó tendido sobre la calzada.

Media hora después, en las calles Los Ríos y Alcedo, en el centro de Guayaquil, Alejandro Gabriel Palomeque Morocho, de 22 años, también fue asesinado. Al igual que Salas, tenía procesos judiciales previos por robo y tráfico de estupefacientes.

Posteriormente, a las 23:00, en la manzana 111 de la ciudadela Los Vergeles, Luis Rubén Granoble Pincay, de 24 años, fue eliminado a tiros.

Familiares informaron a la policía que Granoble había tenido problemas con personas del sector. Se encontraba a bordo de una tricimoto cuando fue interceptado por sujetos que le dispararon cinco veces. 

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