A partir de las 21:00 del 18 de septiembre de 2024, los comercios en las calles Clemente Yeroví y Diego de Vásquez, en Carcelén, norte de Quito, comenzaron a cerrar sus puertas anticipadamente debido al apagón. Decenas de negocios en la zona optaron por finalizar sus actividades una hora antes de lo habitual.

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En paralelo, se desplegó un operativo de seguridad con más de 20 policías, quienes realizaron controles vehiculares en el área, solicitando documentos a los conductores y efectuando registros personales. Según el coronel Luis Mantilla, jefe del Distrito La Delicia, los agentes fueron ubicados en puntos clave como hospitales, la terminal terrestre de Carcelén, centros comerciales y un mercado. Este operativo se mantendrá hasta las 06:00 del día siguiente.

Otro punto de control con presencia militar se instaló en las inmediaciones de la cárcel 4, ubicada en El Condado. A las 22:00, el sector quedó completamente a oscuras, con escaso tránsito vehicular.

Mientras tanto, en Carapungo, al norte de Quito, se registró una muerte violenta antes de las 21:00, lo que dejó conmocionados a los residentes. Un comerciante local, que prefirió no identificarse, contó que escuchó al menos 10 disparos y vio desde su ventana a un hombre con casco intentar escapar, pero fue alcanzado y baleado en varias ocasiones. La Policía no ha proporcionado más detalles sobre este incidente.

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