Dicen que el dinero no compra la felicidad; sin embargo, esos billetitos verdes otorgan la tranquilidad que cualquier padre o madre de familia, joven o hasta adulto mayor pueda desear. Compra los alimentos, paga las deudas y permite invertir.

Sin embargo, ‘póngase once’ con las publicaciones en internet en las que se piden datos personales a cambio de dinero o empleo.

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Alejandro Varas, experto en protección de datos, afirma que si no tuviera la experticia en el tema, sin problema podría haber caído en una supuesta inversión con retorno a corto plazo a nombre de la Corporación Favorita.

“Hace unos días navegaba en YouTube y me apareció un recuadro en el que me ofrecían dinero a cambio de una cuota. Era algo que para un ojo que no está entrenado puede parecer verídico”, comenta.

Dicha publicación primero le mostraba un cuadro al estilo de una conversión: si daba 250, recibiría 1.150 dólares en un tiempo de solo dos meses.

Pero, ¿qué tiene que ver un ‘ojo entrenado’? Alejandro se refiere al diseño de la página en la que ‘cayó’ al hacer clic: parecía hecho por un profesional. “Quienes crean esto tienen suficiente conocimiento técnico para hacerlas pasar como fuentes autorizadas para la solicitud de datos”, advierte. No obstante, “nada que parezca muy bueno debe ser cierto”, recalca.

Para esto, él sugiere a los usuarios huir, como si se tratara de un delincuente al que ven cara a cara, si les llegan a pedir datos personales como nombres completos, correo electrónico, número de cédula o hasta número de alguna tarjeta de crédito o débito.

Estas publicaciones no tienen mucha duración, ya que los equipos detrás de las plataformas digitales de empresas grandes se encargan de revisar constantemente la red, para denunciarlas.

Y estas no son las únicas publicaciones, sino que también se ofertan plazas de trabajo en entidades bancarias.

“El proceso de selección no es tan sencillo como en estos casos lo pintan. Se pasan muchos filtros para que se llegue a contactar a alguien de la empresa”, explica Mariasol Mieles, ingeniera en Gestión de Recursos Humanos.

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Ella, quien en su lugar de trabajo ha recibido denuncias del mismo tipo de estafa, comenta que los usuarios que quieran conocer de las vacantes en alguna empresa, deben consultar páginas como los Hiring Rooms o perfiles como los de LinkedIn, red social para generar conexiones laborales.

Ambos coinciden en que “todo depende del criterio y capacidad de análisis que tengan los usuarios” en cuanto a discernir si se trata de un anuncio verdadero o uno falso; y para finalizar puntualiza que hay ‘señales’ que evidencian que estos anuncios son ‘truchos’, como los errores ortográficos o que son publicados a destiempo.

Por su parte, Corporación La Favorita, empresa ecuatoriana propietaria de cadenas de supermercados, aclara que sus actividades comerciales no están vinculadas a estas estafas potencialmente masivas. Según la vocera de la institución, esta situación genera preocupación entre los altos ejecutivos.

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