A ver varón, tú que eres lector de EXTRA y que vendes en tu tienda esos cigarrillos chinos, sabías que no solo estás apoyando el contrabando y el comercio ilícito, sino que además actúas de manera desleal contra los comerciantes que trabajan apegados a la ley.

¿No lo crees? Pela bien el ojo con este detalle que involucra a tu negocio. La agencia de regulación, Arcsa, lanzó una normativa que entró en vigencia el 31 de mayo de este año y que tiene que ver con el control y vigilancia de los establecimientos y productos de tabaco comercializados a nivel nacional.

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Dicha normativa incluye inspecciones y retiro de productos de tabaco en la vía pública. Esto quiere decir que si te ven vendiendo esos cigarrillos ‘cohetes’, sin paro alguno, te los van a quitar. Pero aquí viene lo más duro.

¡Ponte once! No te expongas. La agencia también determina el uso de medidas provisionales en caso de identificar incumplimientos normativos. En pocas palabras, sin definir la cantidad mínima de producto ( puede ser una cajetilla, como miles) te las pueden decomisar y a eso súmale que te cerrarán temporalmente la tienda, el minimarket o cualquier negocio, donde encuentren el tabaco de venta ilegal.

Y si creíste que ahí termina todo. No, mi brother, aquí viene la sanción. Arcsa se verá obligada a iniciar procesos administrativos sancionatorios, en caso de presentarse incumplimientos normativos.

Si las cajetillas no tienen el etiquetado de advertencia sanitaria, las multas van entre 50 (22.500 dólares) y 200 (90 mil dólares) remuneraciones básicas unificadas.

Finalmente, habrás perdido toda la mercancía cuando la entidad de regulación ordene la destrucción de los productos decomisados.

Niveles alarmantes

Tal vez, esto que estás leyendo te cayó como balde de agua fría, pero debes entender que las entidades de control no lo hacen por molestar a los pequeños negocios, sino para evitar el ingreso ilícito de estos cigarrillos, cuyo incremento en el Ecuador ha impactado de manera negativa al país en materia económica y social, alcanzando un nivel alarmante del 79% de participación de mercado a diciembre de 2022, según las últimas cifras presentadas por la encuestadora Invamer.

“La mayor participación del mercado corresponde a cigarrillos ilícitos provenientes de Asia con un 64,2% bajo las marcas Silver Elephant y Carnival”, detalla la abogada Gabriela Uquillas, directora ejecutiva del Comité Empresarial Ecuatoriano.

Agrega que estas cifras alarmantes no solo afectan a los negocios, la industria y consumidores, sino también al Estado Ecuatoriano, que desde el año 2015 ha dejado de recaudar más de $1.500 millones de dólares solo por concepto de evasión del ICE.

Ocho de cada 10 cigarrillos que se consumen en el país son ilegales, es decir el 79% del mercado de cigarrillos en el país es de contrabando.

Tiendas y Bahía

Así como hay tenderos pilas, tal es el caso de Silvia Paz, que dice no vender ninguna marca de cigarrillos, hay otros como Luz Maldonado que se las juega. Ella está al tanto de las prohibiciones, pero de igual manera en su tienda, ubicada en un populoso sector de Guayaquil, vende cigarrillos chinos marca Silver Elephant, que adquiere en el sector comercial de la Bahía (en este lugar se venden libremente y sin ningún control los cigarrillos asiáticos).

Luz dice comprar solo dos cajetillas a la semana porque es el que le piden, aunque hay clientes sabidos que quieren todo casi que ‘a vaca’ y aflojan por cada uno entre 5 y 10 centavos de dólar, cuando el precio es de 15 centavos, lo que no le resulta.

Admite que no desea meterse en problemas con la ley, por eso ya no los tendrá en su tienda. Incluso ha habido ocasiones en que los cigarrillos le han llegado caducados.

Por eso se quedará con la venta de los tabacos legales y tradicionales como Marlboro y Líder, este es el que más sale. Vende 3 por un dólar y cada cajetilla de 20 cigarrillos sale en unos 6 dólares, mientras que el chino se vende entre 1 dólar o 1,50.

Decomisos

Hasta septiembre del 2023, Arcsa había detectado y retirado 28.949 cajetillas irregulares, que dan un total de casi medio millón de cigarrillos que incumplen la ley. De esta forma, se busca combatir el contrabando de productos del tabaco y precautelar la salud de los ecuatorianos.

Amigo tendero, si quieres hacer patria, te contamos que más del 79% de cigarrillos ilegales que se venden a tu alrededor no pagan impuestos, lo que se resume en un perjuicio al Estado de más de 260 millones de dólares anuales, por recaudación fiscal.

Si eres de los que vende los cigarrillos lícitos, que te deja tu proveedor, entonces eres uno de los afectados, porque debes competir con vendedores desleales, aquellos que comercializan las cajetillas de 20 cigarrillos entre 1,50 y 3 dólares. Mientras que los productos que tú vendes y que cumplen las leyes pueden costar más de 6 dólares.

Contra la salud

Si sigues vendiendo esos cigarrillos ‘chuecos’ estás afectando la salud de los consumidores por sus componentes de metales pesados.

Presta atención que aquí te lo explicamos. Según investigadores, que publicaron sus hallazgos en la revista Tobacco Control, algunos cigarrillos provenientes de Asia contienen cantidades de plomo, arsénico y cadmio.

Geoffrey Fong, de la University of Waterloo en Canadá, señaló que la presencia de dichos metales se debe al suelo contaminado, cuyos minerales son absorbidos por las plantaciones de tabaco.

“Estos metales ingresan a los fumadores junto con un coctel de otros tóxicos. El efecto de la exposición acumulativa a múltiples tóxicos, incluidos los metales, es el problema de salud pública que deben solucionarse”, escribió el autor Richard O’Connor, del Instituto del Cáncer Roswell Park en Buffalo, Nueva York.

Cómo frenar el ingreso ilegal

Según la abogada Uquillas, la base del problema proviene de la desproporcionada carga tributaria que mantienen los cigarrillos, ya que en 2014, el nivel de contrabando era del 5% y tras las Reformas Tributarias de los años 2015 y 2016 la incidencia de comercio ilícito de cigarrillos ha ido incrementando de manera abrupta hasta llegar a la cifra actual de 79%.

“Si bien el objetivo fundamental de estas reformas era generar un mayor recaudo de impuestos y disminuir el consumo de cigarrillos, los resultados no han sido los esperados. Por un lado, el volumen de ventas legales ha caído y por lo tanto el recaudo y, por otro lado, el consumo se mantiene”, detalla.

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