El cantón Quinindé fue escenario de un nuevo crimen violento la noche del viernes 6 de diciembre, cuando alrededor de las 20:15, se escucharon cinco disparos cerca del antiguo puente sobre el río Blanco, a tan solo diez metros del puente peatonal.

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La víctima, identificada como Jixon Jama, fue atacada por sicarios que aprovecharon la falta de luz en la zona para cometer el asesinato.

Aparecieron en la oscuridad

Según testigos, la zona estaba a oscuras en el momento del ataque, lo que permitió a los pistoleros actuar sin ser vistos. Este hecho se produce después de varios meses de calma en el cantón, en los que no se habían reportado incidentes de sicariato ni otros hechos violentos de gran magnitud.

El asesinato de Jama ha conmocionado a la comunidad local, que había disfrutado de un período de relativa tranquilidad. Las autoridades aún no han logrado identificar a los responsables del crimen, pero la hipótesis más fuerte es que se trató de un ataque dirigido, dado el modus operandi y la situación de vulnerabilidad creada por la oscuridad.

Las autoridades de Quinindé han iniciado las investigaciones para esclarecer el caso, mientras los residentes del cantón se muestran preocupados por el regreso de la violencia en la región.

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