¡Récord ‘chueco’! Luis David García García, de 23 años, alias Luigi, uno de los detenidos en una operación conjunta entre la Policía Nacional y Fuerzas Armadas desplegada en Portoviejo, provincia de Manabí, registra un amplio historial delictivo y andaba bien campante. Según la policía, él lideraba un grupo de sicarios del GDO Los Choneros.

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En la página web del Consejo de la Judicatura y Función Judicial arroja que García cuenta con 82 causas judiciales, entre ellas por homicidio, cobro de dinero, tráfico de drogas, robo, delincuencia organizada, lesiones causadas por accidente, secuestro extorsivo, suplantación de identidad, tenencia y porte de armas, usura, hurto y tortura. También registra una demanda por alimentos.

Por todo ese historial, el Bloque de Seguridad de Manabí lo consideraba un objetivo de peligrosidad y le seguían los pasos. La madrugada de ayer, lo atraparon en el sector Ciudad Perdida, en Portoviejo, capital manabita. 

'Guarida de sicarios'

La incursión contó con un contingente de 236 policías y 180 militares. Según el comandante policial de la Subzona Manabí #13, Lenin Peralta, la zona intervenida funcionaba como una “guarida de sicarios”, era un “refugio de Los Choneros. Se almacenaban armas, municiones, vehículos y servía de descanso para los presuntos sicarios”, indicó.

Junto a alias Luigi fueron aprehendidos otro sujeto, a una mujer y se aisló a un menor de edad. La justicia dictó prisión preventiva para dos de los hombres: García García y Jonathan Gabriel Alcívar Robles, este último oriundo de la provincia del Guayas.

Incautaron armas, municiones y motocicletas

Durante el operativo, en el cual incursionaron en 180 viviendas, los agentes incautaron tres pistolas calibre 9 milímetros, 65 municiones y tres motocicletas. Dos de estos vehículos constaban como robados, mientras que el tercero tenía alteraciones en sus números de identificación.

“Estos ciudadanos tenían armas suficientes para cometer delitos de sicariato. Una de las motocicletas incautadas es tipo enduro”, sostuvo Peralta.

Según la Policía Nacional, el grupo delictivo operaba con un sistema de cámaras de seguridad, estratégicamente ubicadas en el sector. Con esos implementos vigilaban y podían evadir operativos.

Las autoridades también indicaron que los detenidos podrían estar vinculados con entre 10 y 15 asesinatos por encargo. Para determinar su participación en estos crímenes, se realizarán peritajes balísticos a las armas decomisadas.

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