“El sueño de mi nieto era culminar sus estudios secundarios, para buscar un trabajo”, decía con impotencia Lucía Martínez, frente al féretro de su nieto Anthony José Sánchez Castro, de 17 años, quien falleció por una descarga de electricidad.

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La tarde del miércoles 18 de septiembre de 2024, al ver que no había agua en casa de sus abuelos maternos, en el sector Jigual del recinto Los Quemados, de Daule, Guayas, el adolescente fue a revisar la bomba con la que extraen el líquido vital de un pozo, a tres metros de la vivienda. 

Un grito alertó al abuelo, Antonio Castro, quien pidió ayuda a sus vecinos, pero Anthony ya no tenía signos vitales. Solo comunicaron el hecho a la policía del recinto La T, de Daule, para el procedimiento.

Agentes de la Unidad de Muertes Violentas (Dinased), al llegar al lugar de los hechos comprobaron que menor tenía en su pecho huellas de quemaduras debido a la fuerte descarga.

El joven, residía con sus abuelos en el mencionado recinto y cursaba el segundo año de bachillerato en un colegio de la parroquia El Laurel de Daule.

" Siempre nos decía que deseaba terminar los estudios secundarios, para seguir la carrera de Mecánica, para ser un gran profesional y ayudar a su madre y sus abuelos económicamente. Mi amigo quería arreglar los camiones de su recinto, pero no sé cumplió", comentó Carlos, compañero de estudio de la víctima.

Lucía Martínez, entre lágrimas, recordaba  los momentos que compartió con su nieto, " Solo pido a Dios, me de fortaleza para soportar su partida. No teníamos nada de agua y por eso él fue a haber que tenía la bomba", sostuvo la abuela. 

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