“Israel, entra hijo”. Ese fue el grito con el que Teresa Cortez alertó a su vástago sobre los disparos que se escucharon en la calle, en la ciudadela San Gregorio, del cantón Babahoyo, en la provincia de Los Ríos.

Serían alrededor de las 20:15 del sábado 8 de abril de 2023, cuando la mujer estaba terminando de vestirse después de tomar una ducha, y escuchó las detonaciones. Corrió hacia la sala para ver a su hijo que estaba afuera.

Al salir se encontró de frente con Israel Herrera Cortez, de 25 años, alias Zapallento, pero él cayó en la sala ante la mirada entristecida de su progenitora, quien lo tomó en sus brazos y empezó a pedir ayuda.

El joven habría sido sorprendido por unos sujetos armados que lo siguieron hasta el interior de su domicilio.

Un vecino trasladó al herido hasta el hospital Martín Icaza de Babahoyo, donde confirmaron que ya no tenía signos vitales. Tras oír a los médicos, Teresa le dio un último abrazo a su retoño mientras aún estaba en la silla de ruedas.

La mujer relató que antes del suceso, su hijo se había comido una salchipapa y luego sacó una silla para sentarse en la vereda del portal de su casa.

Ese momento habría sido aprovechado por los victimarios, quienes llegaron a pie hasta donde estaba el hombre.

Israel intentó esconderse en su casa, pero los maleantes lo siguieron hasta rematarlo. Acto seguido huyeron.

El capitán Luis Garófalo, jefe del Circuito, informó que en la escena se levantaron cinco indicios balísticos y además realizaron la recolección de datos que ayuden a esclarecer el hecho.

El jefe policial también confirmó que Israel tenía antecedentes por tráfico ilícito de drogas y en enero de este año había salido de prisión.

Los deudos del joven desconocen cuál fue el motivo del ataque. Teresa refirió que su hijo trabajaba como albañil y nunca le dijo que su vida estaría en peligro. (TOF)