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Manabí: Con el lodo hasta las rodillas
Chone está en emergencia por las millonarias pérdidas. Las lluvias provocaron crecidas de ríos, que han arrasado cultivos y vidas
Con sandalias en las manos, Lisbeth Zambrano caminaba con parte de su cuerpo enlodado. Esta mujer, que en una funda llevaba unas cuantas prendas de vestir, representaba el estado en que permanecen las casi 3.000 familias afectadas por el temporal invernal en el cantón Chone, provincia de Manabí.
Zambrano vio de cerca la muerte. Ella es vecina de don Antonio Giler y Regina del Carmen Villalba, adultos mayores que fallecieron tras quedar cubiertos por un deslave que cayó sobre la casa donde vivían.
Entre lágrimas, Zambrano le pidió al alcalde de Chone, Leonardo Rodríguez, un lugar para poder estar con sus familiares. Su casa se encuentra ubicada en una zona donde se registraron deslizamientos y la crecida de los ríos.
El funcionario anunció que ella iba a ser dirigida a un albergue al que han derivado a varias familias.
Tercera víctima
Al centro de Chone y varios barrios del cantón ya no llegará la leche de la mano de Omar Cevallos. El hombre, que durante 40 años se transportaba en un asno desde el sitio Narciso, llevando el producto, fue otra de las víctimas de la crudeza de las lluvias.
Estauro Cevallos, familiar del anciano, dijo que cuando el comerciante pretendía retornar hasta su vivienda la tarde del martes 7 de marzo de 2023, aparentemente la acémila que montaba se asustó por la correntada y realizó una maniobra que hizo que el hombre cayera.
“Omarsito fue arrastrado por el agua con un desenlace fatal”, lamentó. El cuerpo fue localizado por bomberos de varios cantones, entre ellos los de Santo Domingo y Manta, quienes se han sumado a las labores de ayuda en territorio chonense.
MILLONARIAS PERDIDAS
Chone fue declarado por el Comité de Operaciones Emergentes (COE) cantonal en estado de emergencia. Las pérdidas en el sector productivo son cuantiosas. Así lo detalló un informe emitido por el cabildo local.
En el documento se señala que los perjuicios por los daños en los sembríos de cacao, maíz, pasto y plátano ascienden a unos 3’020.000 dólares; mientras que las pérdidas de animales domésticos representan unos 46.500 dólares.
Las parroquias más afectadas son Santa Rita y Ricaurte.
El comercio urbano también se vio alterado por las calles inundadas y el ingreso de agua a los negocios. Se estima que 1.400 locales fueron afectados, con pérdidas que llegarían a los 700.000 dólares.