Paulina Tamayo fue la pionera de los conciertos virtuales en Ecuador. Así lo cuenta justo un año después de haber realizado su primer espectáculo desde las plataformas digitales.

Hoy, confiesa que al terminar esa velada se sentó a llorar. Los aplausos y gritos del público le hicieron mucha falta. “Lo que más extrañaba son esos momentos en los que la gente me pedía alguna canción y se contentaba al verme”, narra.

Pese a que en un principio todo esto se le hizo difícil, con la ayuda de su hijo, Willie Tamayo, se fue adaptando de a poco.

“Él es ingeniero en sonido y acústica. Es mi mánager. Le gusta la música, es cantante, actor y es el triunfador de un concurso mundial de salsa. Es como yo, pero aumentado y corregido... También tengo mi hija Paola que ahora vive en España”, describe Paulina.

La cantante, quien inició su carrera cuando solo tenía cinco años, cuenta que le ‘choca’ la nueva normalidad tecnológica. “Soy nula, soy cero. Yo no estaría en redes si no fuera por mi hijo. Él es quien a diario pone cosas, lo que sí hago yo es responder los mensajes”, acota.

Es tanto el cariño y gratitud que Paulina siente por su público que hasta se creó un Tiktok para compartir videos y anécdotas. “Me he divertido mucho con eso”, dice.

A Toda Madre

Este año, la artista cumple 50 años de carrera musical y rememora que todo comenzó con un concurso de talentos en una radio, a la que fue acompañada por su madre.

La progenitora de Paulina fue su representante hasta que la artista tuvo 21 años, se casó y se mudó a Estados Unidos.

Aunque estuvieron separadas durante un largo tiempo, cuando retornó a Ecuador se reencontraron y hasta ahora son inseparables. En este mes, en el que se celebra a mamá, ella quiere regalarle música. A ella y a todas sus seguidoras.

Se transmitirá en vivo hoy, desde un hotel del norte de la capital, y estará plagado de sorpresas. “Empezará a las 15:00 (en Youtube) para que lo puedan ver en cualquier parte del mundo”, menciona.

Una atuendo elegante formará parte del vestuario que ella usará. “Será algo de mi estilo, muy formal. Admiro a las cantantes que usan otras prendas, pero yo no me veo entonando un sanjuanito o un yaraví con un escote y un partido”, comenta.