Exclusivo
Farándula

El personaje tiene al menos 20 años y está inspirado en las mujeres de su familia.CORTESIA

Monserrath Astudillo: La Cuquita proyecta su vejez

La actriz cuencana da vida a un personaje entrañable e irreverente inspirado en su mamá y en su tía abuela en su reciente monólogo

Los olvidos, las lagunas mentales, los idilios, las penas y los sueños lúcidos que aparecen en ‘La Cuquita’ son el hilo narrativo del reciente monólogo de la cuencana Monserrath Astudillo. La Casa de la Cuca representa las vivencias de una morlaca de abolengo.

“A veces creo que es una proyección de mi propia vejez, y me lo pienso más, ahora que me acerco a los cincuenta. Pero por eso encanta, porque es rebelde, es cómica, se parece a mí y a las mujeres que han sido importantes en mi vida”, dice la actriz.

Pero este personaje tiene más de 20 años “Está inspirada en mi mamá y en una tía abuela que siempre está presente. Fue como un homenaje a ellas. La bosquejé en mi primer monólogo y, con el paso de los años fue evolucionando, inmiscuyéndose, hasta que finalmente cobró vida propia”, recuerda la cuencana.

PURA RISA

Durante el confinamiento, en 2020, Astudillo decidió ahondar en el papel, en una serie de sketches hechos para la web, grabados en el centro cultural Casa Toledo. Con una peluca gris, sombrero ancho, lentes grandes, collar de perlas y con ropa típica de señora, Astudillo personifica a una viejita que a pesar de su mala memoria y sus limitaciones para caminar no deja de ser irreverente y pícara.

CONOCE TAMBIÉN: Roger Waters quiere probar lo nuestro

“La respuesta del público fue muy positiva, porque es un personaje arquetípico que evoca a las abuelas, tías, vecinas”, asegura la actriz. Y es que en este monólogo, la protagonista evoca la nostalgia de la infancia, de la juventud, de los primeros amores, y de la maternidad.

“La gente se ríe, pero también llora. Muchos salen corriendo a llamar a sus papás, y eso me parece importantísimo, que se piense en la vejez con dignidad y con amor. Que se valore a las personas mayores y que no se las deje de lado o se las olvide mientras pasan por esa etapa de la vida. Hay que honrar a la vejez”, indica.

Tras esta temporada en la capital, en el Teatro CCI, La casa de la Cuca iniciará el 2024 con una serie de presentaciones en otras ciudades del país, entre ellas Ambato, Riobamba e Ibarra. “Estoy muy feliz con la acogida que ha tenido la obra y espero llegar con ella a nivel nacional”, asevera la artista.

¿Quieres acceder a todo el contenido de calidad sin límites? ¡SUSCRÍBETE AQUÍ!