La productora audiovisual y directora de cine, Mara Topic Verduga, cumplió su primera semana como Miss Universo Ecuador. Aunque confiesa tener una agenda agitada, está “gozando” este proceso, lo cual no significa que baje la guardia en su preparación para representar al país en el Miss Universo 2024 en México, la cual inicia este lunes 17 de junio.

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Ya tiene a su preparador, se trata de Alexander González (54 años), el coach de reinas de belleza, que asesoró a la Miss Universo 2003, la dominicana Amelia Vega; a Miss Ecuador 2004, María Susana Rivadeneira; a la Virreina universal 2021, la paraguaya y esposa del cantante Marc Anthony, Nadia Ferreira; y a Miss Mundo Ecuador 2021, Ámar Pacheco.

Más tranquila y después de una larga siesta, la guayaquileña, de 29 años, habla con EXTRA de todo lo que se viene tras obtener la corona.

Lo primero que me dijo fue que no la llamen Mara Topic Verduga, sino Ecuador.

Totalmente, ahora mi nombre cambió, voy a ser recordada como Ecuador por el resto de los días que me toque vivir.

¿Cómo fue su primera semana como Miss Universo Ecuador?

Increíble, la verdad es que muchos de ustedes saben que mi enamorado terminó conmigo antes del certamen, de la concentración, pero no sé, quizá un corazón se fue, pero ahora tengo 18 millones de corazones (número de habitantes en Ecuador) porque en cada paso que doy, siento que todos ustedes están conmigo, que están abrazándome, dándome buenas vibras, me dan una palabra de aliento y me hacen sentir muy bonito. Para mí es un honor poder representarlos.

Su novio la terminó durante este proceso, ¿qué pasó?

No sé por qué me terminó. No quiero decir nada de eso. Le mando lo mejor del mundo y le agradezco porque si algo no es para ti, no lo es. Eso pasó 4 días antes de la concentración y cuando inició el proceso, esperaba que me escribiera, pero no lo hizo. Recuerdo que después de eso, me puse a llorar enfrente de las chicas (otras candidatas), y todas me apoyaron. Eso es lo lindo de la sororidad, porque me abrazaron, me apoyaron y para mí fue un momento bonito porque transformaron el llanto en risas y la competencia fue mejor para mí. Entendí que debía concentrarme en mi sueño.

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Es mejor sanar acompañada.

Claro, es mejor todo acompañada, por eso invito al público a unirse a este sueño loco que tenemos de traer la corona universal. Unámonos, porque cuando todo es en grupo, la felicidad es compartida. Si tienes tristeza y la compartes, se vuelve consuelo. Todo dolor y pérdida debe ser consolado (...) Yo aconsejo siempre tener una terapeuta, en mi caso, le puedo contar todo, porque así, puedes desahogarte y no quedarte con eso adentro.

Entonces, ¿está a favor de la salud mental?

Soy pro salud mental, porque ha salvado mi vida y yo sé que ha salvado la vida de muchísimas personas y mientras más hablamos del tema y más lo exponemos, muchas personas pueden sumarse a ir a terapia. Ir a terapia no debería ser un tabú o tildado como algo malo. Ir a terapia es como aprender a conducir sabiendo evitar obstáculos, tal cual.

¿Cómo se siente luego de esa ruptura?

Yo me casé con el Universo, entonces siento que ese capítulo de mi vida se cerró, porque ahora estoy enfocada en mi país. Tengo que estar constantemente dando amor.

Creo que el tener muchas actividades le ha ayudado, como por ejemplo, conoció a la Miss Universo Sheynnis Palacios y estuvo con ella al día siguiente de obtener su corona.

Ella es espectacular, ¡qué reina de lujo tenemos! Y digo tenemos, porque somos latinos y debemos estar orgullosos de que nos represente porque es centroamericana. Me siento muy identificada con ella y me inspira. Es una portavoz de lo que somos los latinos, fortaleza, perseverancia y alegría.

Orgullosa de ser latina.

Yo siempre digo que soy latina y se me nota. Me ponen música y bailo donde sea. Amo bailar. Imagínate, vivo en Estados Unidos, camino y escucho música y saben que soy latina porque me muevo, es como una esencia que no me la pueden quitar.

¿Por qué se fue a vivir a Estados Unidos?

Fue por estudios. Gané una beca para mi licenciatura y mi máster en la New York Film Academy. Pagué un porcentaje mínimo y no podía decirle que no. Así quedé en grandes compañías.

¿Siempre tuvo el sueño de ser Miss Universo Ecuador?

Te cuento algo, cuando yo era muy chiquita, mi mamá me llevó al doctor a ver cuánto podía medir. Entonces le dije al doctor que yo quería medir bastante, porque iba a ser la próxima Miss Universo y la doctora me dijo que no, porque mediría 1,60 metros. Mi mamá estaba enojada porque le decía que me estaba dañando los sueños, pero en mi mente dije: Que sea lo que Dios quiera. Era una niña y mira, los tiempos de Dios son perfectos. Si tienes un sueño o un anhelo, debes luchar por eso. A mí me dijeron que no lograría medir 1,70 y, mira, mido 1,75 y estoy cumpliendo mis sueños. No creas en los no, Dios tiene la última palabra.

Este año el Miss Universo será en México, país que usted conoce muy bien, ¿cierto?

(Risas) Totalmente, he trabajado muchísimo con México, hasta hablo como ellos. Por motivos de trabajo, he estudiado bastante en el acento neutro mexicano, aparte me contratan para hacer comerciales y eso me encanta. Amo México por su comida y todo, entonces siento que es un momento bonito para conectar con las personas.

El Miss Universo cambió su visión. Ahora pesa más la historia de vida que la apariencia física. ¿Cuál es la suya?

Eso es algo que le pregunté al jurado al finalizar el certamen. Me dijeron que cuando conté mi historia, los emocioné y motivé. Pasé por un momento difícil que me provocó demasiado estrés en mi cuerpo e hizo que se me desate una enfermedad autoinmune llamada Hashimoto. Muchas personas pueden conectar conmigo de esa forma.

¿Qué ocurrió?

Esto comenzó a aparecer en el 2018. Una condición que fue difícil de entender. Poco a poco he mejorado y teniendo fuerza para hacer cambios en mi vida. Esta condición me ha enseñado el significado de resiliencia, porque debes cada día ver cómo hacer para que te sientas mejor que ayer. Mis aliados son el deporte y la alimentación.

Pero vemos que las personas y especialmente las marcas han reaccionado positivamente a su condición, tanto así que hasta le donaron dos pelucas de cabello natural.

Muchas marcas me dijeron que entendían mi situación y me dijeron que me mandarían las pelucas (...) Este concurso debe unir al país porque una Miss Universo Ecuador no camina sola, sino con cada uno de ustedes. Les prometo que voy a hacer un buen trabajo, tanto así que ya estoy pensando en cómo será mi video de presentación en el certamen, porque soy directora de cine y hago videos comerciales y musicales. Quiero que sea una promoción de turismo ecuatoriano, y que se vea plasmado que tenemos paisajes únicos, quiero que se vea como una película y que el universo lo vea y sepa lo que somos los ecuatorianos. La flora y fauna son un baile de colores que jamás se han visto. Estoy muy emocionada.

Los concursos de belleza han cambiado su enfoque y ahora se busca que las candidatas tengan una historia de vida, que muestren su lado humano. ¿Considera que su historia es un ejemplo de superación?

Totalmente y yo siento que Dios me utilizó como instrumento para inspirar a aquellas personas que todos los días se cuestionan el ‘cómo lo voy a lograr’, porque me pasaba a mí. Recuerdo que hablé con un amigo estilista y le decía, ¿qué voy a hacer yo con este problema del pelo? Me dijo que todo tiene un porqué y que si estaba ahí era porque así debía estar. Había muchos cambios en el Miss Universo y no los veíamos reflejados, pero ahora sí se notan con más fuerza.

¿Qué le diría a quienes están leyendo esta entrevista y luchan con algún problema de salud o tienen miedo de cumplir sus sueños?

Les diría que no importa cuánto midas, qué deficiencia tengas, si tienes algo físico, porque lo que importa es la esencia y lo que está en tu mente y corazón. Sueña en grande.