La actriz Emma Guerrero dijo que su ‘pelea’ con Érika Vélez es un tema que dejó en el pasado, pero cuando le preguntan por ella, parece incomodarle, y más aún cuando se le consultó si se tomaría un café con Víctor Araúz, con quien parece, las cosas no están bien.

(Lea también: ¿Qué implicaciones legales enfrentan Emma Guerrero y Érika Vélez por la filtración de chats?)

Esto se remonta a inicios de septiembre, cuando Emma comentó en el pódcast Dos tontos con micrófono, que comparte con el ex de Érika, Carlos Scavone, que la también actriz es novia del cómico Víctor Aráuz, un rumor que se escucha en la farándula desde hace varios años. Algo que, evidentemente, molestó a Vélez.

El conflicto escaló cuando Emma dijo a EXTRA: “Tengo capturas de chats con mensajes un poco soeces de parte de Érika. Si siguen insistiendo en hacer esto más grande, voy a tener que publicarlas porque tengo que defenderme de alguna manera”.

Esto provocó que Vélez explicara a este Diario que no había dado autorización para hacer pública la conversación y que su colega debería asesorarse. Lo que llevó a especular sobre una posible demanda, que parece nunca llegó o bueno, eso es lo que Guerrero explicó.

“No pasó nada, no es algo que yo sepa, no me llegó nada a mis manos. Estoy contenta y con buena energía”.

Sobre Érika, añadió: “Eso para mí ya está superarchivado, ya está archivado”. Asimismo, al consultarle si se tomaría un café con Aráuz, evadió la respuesta y no quiso contestar, pero añadió que hablaría de ellos “si se meten conmigo, claro, pero por el momento todo está bien”.

Para finaliza Emma advirtió que, pese a todo la polémica por la que atravesó con su compañero Carlos, no cambiarían su forma de hacer el pódcast.

“Todo es orgánico, es como si no hubiera cámara, es sin filtro. Somos nosotros, no hay exabruptos como dicen, nosotros porque podemos y el que no, que aplauda”, finalizó.  

¿Quieres acceder a todo el contenido de calidad sin límites? ¡SUSCRÍBETE AQUÍ!