Exclusivo
Deportes
Irene Tobar: "Fue Dios quien me trajo hasta acá y sé cual es su propósito"
La última temporada atajó en Liga (Q) en la Superliga Femenina, pero las vueltas del fútbol la terminaron llevando al Al Amal SC
La guayaquileña Irene Tobar, arquera de la selección de Ecuador y de equipos como Rocafuerte, Unión Española, Deportivo Quito, Real Cartagena (Colombia), Independiente del Valle, y la última temporada en Liga de Quito, ha dado el mayor salto de su carrera deportiva: es la primera futbolista ecuatoriana en la Premier League de Arabia Saudita.
El mundialista con la Tri femenina en Canadá 2015 fue fichada por el equipo Al Amal SC. ¡Sí! Está en el mismo país de Medio Oriente donde juegan Cristiano Ronaldo, Neymar, entre otros cracks.
Irene, además de arquera, es fotógrafa y tiene una licenciatura en marketing. En las Dragonas de Independiente del Valle, era quien se encargaba de todo lo relacionado con el equipo en redes sociales. Ahora, en su nuevo club, también hará algo en ese tema.
ASÍ EMPEZÓ SU NUEVA AVENTURA
Irene había comprado un pasaje para irse de vacaciones a Estados Unidos. Tenía todo listo, pero una madrugada recibió un mensaje en su celular. Era su representante desde España, que le decía: “Irene, en Arabia Saudita te quieren, tienen toda tu carrera, tus vídeos, tus participaciones con la selección, tienes cuatro días para estar allá”.
En cuatro días cambió su vida. Las vacaciones quedaron para después, y emprendió el viaje más largo de su vida: 27 horas entre escalas (Colombia y Turquía) e intercambio de aviones, hasta llegar a Taif, en la provincia de La Meca, en Arabia Saudita.
“Los primeros días (llegó en octubre) no salía de lo impresionada que estaba, pasaba a ser la primera ecuatoriana en venir a jugar tan lejos”, expresa Tobar en entrevista con EXTRA.
Dice que las chicas del equipo no sabían que la habían contratado, que todo fue una sorpresa: “Soy la única ecuatoriana en el equipo. Estoy más que segura de que fue Dios quien me trajo hasta acá. Ahora sé cuál es su propósito, y es por el bien de las chicas del futuro. Eso va a pasar, me gustaría que vengan más de Ecuador”, dice Irene, quien creció admirando las atajadas de José Francisco Cevallos.
ENTRE ESTUDIOS Y EJERCICIOS
Irene siente que los días en Arabia son largos; sin embargo, los aprovecha estudiando la lengua oficial (árabe): “Ya voy aprendiendo varias palabras, eso me está ayudando mucho”, expresa.
Pero no solo se enfoca en los estudios, también invierte su tiempo en el gimnasio, una de sus debilidades.
“Sé que estoy al otro lado del mundo en todo sentido, que los ojos del fútbol ahora están puestos acá, por Cristiano Ronaldo, Karim Benzema y más jugadores de élite”.
ENTRENAR EN LA NOCHE
También se ha debido acostumbrar a los horarios de entrenamientos, ya que en Arabia los equipos lo hacen por las noches. “Debido al clima (calor extremo en algunas regiones), todos entrenamos ya cuando el sol se va, y terminamos en la noche. Es más fresco y sirve para aprovechar en todo sentido. Los entrenamientos se hacen en un mega complejo, tenemos todo a nuestra disposición”, expresa.
Y lo mismo sucede fuera de la cancha, todo por culpa del calor. “Acá la vida es nocturna, mis entrenamientos se hacen en la noche. La gente sale a comprar, pasear, hacer sus cosas hasta la madrugada. Es fácil ver gente hasta las 4 o 5 de la madrugada. Es por eso que se levantan tarde. En mi caso, yo me levanto bien temprano, como si estuviera en Ecuador”, expresa la golera.
VESTIDA Y SIN TRAGO
Uno de los tantos cambios en su vida ha sido la vestimenta. Allá no puede usar en público las pantalonetas cortas y ajustadas que tanto le gusta lucir, debido al código de vestimenta que rige en esa nación árabe.
“Cuando voy al gimnasio hago mis trabajos de manera cómoda, pero para salir a la calle, tengo que estar cubierta en todo, no la cabeza, pero sí el resto del cuerpo”.
También le ha sorprendido la prohibición de no beber alcohol, entre otras restricciones como las muestras de afecto en público.
LAS JUGADORAS SAUDITAS
Irene cree que su presencia en Arabia Saudita es una gran oportunidad, ya que le puede abrir el mercado del balompié a otras compatriotas. “Ojo, yo soy arquera, un puesto que poco se sale del país. Creo que las chicas que jueguen de defensoras, volantes y delanteras, seguro que vendrán”.
A pesar de que ese país culturalmente favorece a los hombres, el apoyo que se le da al fútbol femenino es importante, debido a que hay muchas jugadoras sauditas jóvenes que aprenden de las que llegan.
“Este país, en unos años, será una potencia del fútbol femenino, porque le están dando todo el respaldo con logística al fútbol femenino. Tienen la mejor infraestructura que se pueda soñar”, explicó Tobar.
“En la parte cultural también hay que dejar una huella. Acá les digo que vivo en la Mitad del Mundo, y eso tengo que explicarles, que un pie pongo en el norte y el otro al sur. Les hablo de las bellezas de mi Ecuador”, señala Irene.
LA COMIDA
El tema de la comida es un punto favorable. La arquera saca su parte de chef: “Cada uno tiene su habitación, yo compro la comida, me gusta atenderme bien, en eso no hay problemas, pero acá me ha dado por comer el verdadero shawarma, eso sí es rico, y a veces abuso, pero es delicioso”, dice Tobar.
Aunque confiesa que extraña comerse un bolón o unos chifles con queso: “Estoy buscando los plátanos, eso sí los extraño, crean que hace falta”.
REZOS Y SEGURIDAD
A Irene también le ha llamado la atención el ‘salat’, conocida así la práctica de los musulmanes de rezar cinco veces al día, uno de los cinco pilares del Islam, la religión oficial de Arabia.
Mientras que la inseguridad es una palabra que no existe. “Acá no existen robos. Claro que los primeros días se me hacía raro, pero luego me di cuenta de que acá no tengo que cuidar nada de mis pertenencias, que hay respeto ante todo”.