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Barcelona SC: La Noche Amarilla, de una simple presentación a una mega fiesta
En los 80 y 90 no existían las Noches Amarillas. Estos eventos, con los nuevos fichajes de Barcelona SC, eran muy sencillos
La Noche Amarilla, evento emblema de Barcelona, ha evolucionado notablemente con el tiempo, pasando de ser una sencilla presentación en blanco y negro a una fiesta a todo color que marca el inicio de cada temporada.
En los años 70, esta clase de celebraciones no existía. Fue en los 80 y 90, con la incorporación de auspiciantes principales en las camisetas, cuando las presentaciones del equipo comenzaron a tomar forma. Durante la presidencia de Isidro Romero, se institucionalizó este evento.
La dinámica era simple: los jugadores salían acompañados por modelos, posaban frente a una pared con el logo del auspiciante y finalizaban con la tradicional fotografía en la Av. Juan Tanca Marengo, al norte de Guayaquil.
EN LOS 80 NO HABÍA NI PRESENTACIÓN NI FIESTA
“En 1991, la presentación se realizaba en un salón amplio; una chica vestida de rojo nos guiaba hasta la dirigencia. Era algo básico”, rememora el exjugador José Gavica, destacando la modestia de aquellos actos. Similar es el testimonio del periodista Jorge Guayaquil: “Las Noches Amarillas de antaño eran emotivas pero muy sencillas. Nada que ver con el espectáculo que hoy vivimos”.
Para finales de los 90, las presentaciones comenzaron a trasladarse a hoteles y centros de la ciudad, como el Centro de Arte de Guayaquil en 1994. Sin embargo, aún no llevaban el nombre de Noche Amarilla ni incluían las grandes estrellas de hoy. Gustavo Nivelo, directivo de aquella época, subraya que el protagonismo recaía en los auspiciantes: “Era más un evento comercial que del club. La camiseta muchas veces ni siquiera tenía marca”.
EL IMPACTO DEL MARKETING DEPORTIVO LLEGÓ A BARCELONA SC
La llegada del marketing deportivo marcó un punto de inflexión. Según Guayaquil, en los 80 y 90 el uso de publicidad en el fútbol era limitado. “Todo cambió con la entrada de la publicidad agresiva. Los eventos comenzaron a ganar protagonismo, y los hinchas también”.
La evolución fue inevitable. En 1996, Cyril Makanaky, un jugador camerunés contratado oficialmente por Barcelona, marcó el inicio de las presentaciones con invitados especiales. Sin embargo, fue en 2016 cuando la Noche Amarilla se transformó definitivamente.
LA LLEGADA DE LAS ESTRELLAS FUE EN EL 2016
Durante la presidencia de José Francisco Cevallos, el evento alcanzó su mayor esplendor. El 29 de enero de 2016, el legendario Ronaldinho fue el invitado de honor. Ante 75 mil espectadores, Barcelona enfrentó a la Universidad de San Martín en un partido que terminó 4-3 a favor de los toreros. La taquilla superó el millón de dólares, dejando en claro el impacto de esta reinvención.
“Fue una noche histórica, el punto de partida para una nueva etapa en la presentación del equipo. La hinchada de Barcelona lo merecía”, recuerda Cevallos.
UN SHOW QUE TIENE AHORA DE TODO
Hoy, la Noche Amarilla es sinónimo de espectáculo. Ha dejado atrás la simplicidad de los años 90 para convertirse en una celebración masiva que combina fútbol, entretenimiento y nostalgia, consolidándose como uno de los eventos más esperados por los aficionados amarillos.