Exclusivo
Buena Vida

Las risas también forman parte de un buen sexo.Canva

Tickling, el juego erótico que provoca risa y placer

Quítale el aburrimiento al ‘cuerpeo’ y arriésgate a descubrir las zonas más sensibles de tu pareja. Puedes utilizar desde plumas hasta la lengua

Tu cuerpo tiene varios lugares -que quizás no conoces- que te estimulan al punto de ponerte 'aguadito' y con la piel de gallina.

La evolución que ha tenido el sexo ha permitido que las personas sigan experimentando en la cama y conociendo lo que más les gusta, así como las diferentes formas de llevar el erotismo a otro nivel y generar un placer aún mayor, una de estas, el tickling.

Esta práctica le saca el jugo a las zonas más sensibles del cuerpo con el objetivo de llevar a que un orgasmo sea una experiencia completamente diferente.

¡Ojo! Hay que tener en cuenta que esta actividad solo se enfoca en las zonas íntimas, involucra otras partes del cuerpo que le generen cierto hormigueo hasta hacerlo sentir una estimulación diferente a la que está acostumbrado, además de disfrutar de este momento, inclusive aún más si lo hace con otro tipo de elementos como plumas o plumeros.

El tickling busca, a través de las cosquillas -no ‘matarla/o’ de la risa-, liberar endorfinas, sustancia que genera felicidad. Desde el cerebro se envía un mensaje de placer al resto del cuerpo, lo que hace que el orgasmo sea más viable y muy placentero.

Los lugares típicos en los cuales se practica esta técnica son el cuello, detrás de las orejas, las ingles y los pezones. Estas zonas suelen ser las preferidas para la estimulación mediante el tickling.

Si se decide poner en práctica, otra de las recomendaciones es que no solo se pueden usar las manos. También se puede realizar escobillas con cerdas muy suaves, lengüetazos, juguetes sexuales y hasta la respiración (soplidos eróticos), para aumentar el placer con movimientos suaves que rocen la piel.

Consejos

Vibrador con la boca

1. El cosquilleo es el humming (zumbido en inglés), que consiste en tremolar los labios sobre la piel, imitando un vibrador; aunque será doblemente estimulante, ya que la boca de quien lo lleva a cabo también recibe excitación. Los dos sabrán a qué sucumbirán con esa risa que los llevará al delirio.

Oxigenación

2. Es una excelente forma de oxigenar el cuerpo, pues en cada pausa que hacemos al carcajearnos tomamos aire de manera más profunda y relajada.

Anticuerpos

3 .Con esta práctica se generan anticuerpos y con ello también se refuerza el sistema inmunológico. Se fortalece la unión de pareja, ya que se crea un vínculo de complicidad ante el toque y la risa.

¿Quieres acceder a todo el contenido de calidad sin límites? ¡SUSCRÍBETE AQUÍ!