Arrancar el año con un chequeo médico es como darle mantenimiento a tu carro antes de salir a un viaje largo: previenes problemas, te sientes más seguro y verificas que todo esté en orden.

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La doctora Lucy García, gerente médica de Ecuasanitas, destaca la importancia de realizarse esta revisión al menos una vez al año, recomendando particularmente hacerlo en enero. Según la especialista, “es el momento ideal para llevar un control efectivo y detectar cualquier problema a tiempo”.

Esta práctica puede ser la diferencia entre un diagnóstico temprano y futuras complicaciones de salud. Es un proceso que, como mucho, no demora más de 2 a 4 horas.

Además, en enero suele ser más fácil programar citas, según la especialista, lo que ayuda a reducir los tiempos de espera en laboratorios y centros de atención. Además de que es una forma de empezar el nuevo ciclo con pie derecho.

De hecho, un estudio de la Universidad de Stanford destaca que las personas que se realizan chequeos médicos anuales tienen un 40 % más de probabilidades de detectar condiciones tratables en etapas tempranas, como hipertensión, diabetes tipo 2 e incluso ciertos tipos de cáncer, lo que aumenta significativamente las tasas de éxito en los tratamientos.

El objetivo es “ajustar hábitos según los resultados obtenidos”, recalca la doctora García, lo cual, aunque no es una solución mágica, sí permite determinar en qué aspectos necesitamos mejorar.

5 exámenes anuales recomendados

1. Control de glucosa y órganos: La medición de glucosa en sangre es otro componente esencial, ya que ayuda a la detección temprana de diabetes. Además, se recomienda evaluar la función hepática y renal.
2. Análisis sanguíneos vitales: Para todas las edades, los chequeos anuales incluyen hemograma completo para detectar anemia, infecciones o trastornos sanguíneos, y perfil lipídico para identificar altos niveles de colesterol y triglicéridos.
3. Cardio y Cáncer de colon: Para mayores de 40, incluir un electrocardiograma para detectar problemas cardíacos. A partir de los 50, una colonoscopía es clave para detectar cáncer colorrectal, sobre todo si hay antecedentes familiares.
4. Cáncer cervical y osteoporosis: Para mujeres, el papanicolaou y la colposcopía para detectar cáncer cervical. Mamografía desde los 40, o antes si hay antecedentes familiares. Y examen de densitometría ósea para el riesgo de osteoporosis en posmenopáusicas.
5. Próstata: Para los hombres, es importante una prueba de sangre que mida el PSA (antígeno prostático específico). El PSA es como una señal que ayuda a descubrir problemas en la próstata, como crecimientos anormales

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