Buenas tardes, doña Esperancita, le saluda Karla R, soy de Guayaquil. Tengo 33 años y una hija adolescente. Mi historia es la siguiente: Estuve casada con el padre de mi nena hasta hace poco tiempo. Ambos somos comerciantes y un día me comentó que quería hacer un préstamo bancario para levantar el negocio, pero por estar en central de riesgo no podían generarle dicho trámite. Entonces me dijo que el préstamo lo hiciera yo, que para ello teníamos que constar como divorciados por mutuo acuerdo, para que todo fuese aparentemente más rápido. Incluso, fue capaz de acudir donde una pastora para cuentearla y decirle que se iba a separar para que le prestaran el dinero. Pero imagínese usted, este tipo me engañó de la peor manera solo para divorciarse de mí. Siempre estuve con él, en las buenas y en las malas, incluso cuando me llevó a casa de sus padres en Manta tuve que soportar todo tipo de peripecias. Siendo un hombre adulto no tiene decisión y hace lo que dicen sus padres. Me ha dicho que, a pesar de todo, va a seguir conmigo, pero sinceramente no quiero perder mi tiempo. Tengo derecho a ser feliz.

Respuesta:

Efectivamente, no debes seguir con alguien que no quiere ser tu esposo. Entre ustedes no hay sinceridad, por ende, no existe el amor ni la comprensión que requiere una relación. Lo mejor es que cada uno coja su camino y sea feliz de la manera que más le parezca. La canallada que te hizo tu marido fue para quedar libre de compromisos y hacer lo que quiere. Pero no debiste firmar nada, al menos tendrías que haberlo analizado o negociado, pues, al parecer, fuiste la más perjudicada aquí. En cuanto a tu hija, ambos deben estar pendientes de ella. Tienes que cuidarla bien, y él hacerse cargo de la manutención que le corresponde pasar. Se ha vuelto algo muy común esto de los hogares desintegrados, por lo tanto, no eres ni la primera ni la última que pasa por tal situación. Solo te queda salir adelante por ti misma. Si ya sabes trabajar y emprender, continúa haciéndolo independientemente. Pronto encontrarás alguien que te valore y quiera estar contigo por amor y no por interés. Él ya no es más tu esposo y no eres plato de segunda mesa para que aceptes las migajas de nadie. Date tu lugar. ¡He dicho!

Doña Esperancita no solo trata temas relacionados al amor, también de otra índole. Cuente su historia a donaesperancita@granasa.com.ec o puede enviar mensaje al WhatsApp 0990214407.