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¿Cómo ser buen padre? Mira estos prácticos consejos

El más importante es que no les grites son un acto humillante y doloroso para ellos y no arreglan la situación

Por Johanna Valle Coba

23 de agosto, 2024

Ser un buen padre es mucho más que proporcionar lo básico para tus hijos. La calidad del tiempo que compartes con ellos y el tipo de apoyo que ofreces juegan un papel fundamental en su desarrollo. Un enfoque equilibrado y consciente marca la diferencia en el bienestar emocional y psicológico de tus hijos.

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Un estudio realizado por la Universidad de Harvard reveló que los padres que practican una crianza afectuosa y comprometida ayudan a sus hijos a desarrollar habilidades sociales y emocionales más sólidas. Este estudio subraya la importancia de la atención y el apoyo emocional en la crianza.

Recomendaciones para mejorar tu paternidad:

Escucha activamente. Dedica tiempo a escuchar a tus hijos con atención plena. Esto fortalece la comunicación y les demuestra que valoras sus sentimientos y opiniones.
Establece rutinas consistentes. Las rutinas proporcionan estructura y seguridad, ayudando a los niños a entender qué esperar y a sentirse más seguros en su entorno.
Promueve la independencia. Fomenta la autonomía permitiendo que tus hijos tomen decisiones y enfrenten desafíos apropiados para su edad. Esto les ayuda a desarrollar confianza en sí mismos y habilidades para resolver problemas.
Ofrece apoyo emocional. Sé un pilar constante de apoyo durante momentos difíciles. Mostrar empatía y comprensión ayuda a tus hijos a manejar sus emociones de manera saludable.
Modela comportamientos positivos. Los niños aprenden observando. Practica los valores que deseas enseñar, como la honestidad, el respeto y la responsabilidad, para que ellos los internalicen y los reproduzcan.

No lo sobreprotejas

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Un error común entre los papás es intentar proteger a sus hijos de manera excesiva de las situaciones que podrían causarles algún daño. Sin embargo, la sobreprotección impide que el niño aprenda y crezca, e incluso; le dificulta la capacidad para tomar decisiones de manera autónoma. Deja que se enfrente a desafíos y cometa errores son escenarios necesarios para su desarrollo y madurez.

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