La Concordia, cantón de la provincia de Santo Domingo de los Tsáchilas, se ha ganado un primer lugar durante las lluvias de los últimos días: con 239 milímetros (litros de agua por metro cuadrado) fue el cantón que más precipitaciones tuvo en tan solo 24 horas.

Es decir, esto equivaldría a verter 239 litros de agua en cada metro cuadrado de superficie, en este caso, de La Concordia.

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“Sí, es de las zonas más lluviosas de Ecuador, pero, en esta ocasión, cayó en un solo día la mitad de lo que estaba previsto para un mes. Esto no había sucedido en los últimos 60 años”, aseguró Vladimir Arreaga, director de pronósticos de eventos del Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (Inamhi).

El experto explicó que el límite más alto registrado de lluvias en La Concordia, que se ubica en el límite con la provincia de Esmeraldas, para el mes de febrero se ubicaba en 583 milímetros; sin embargo, con los ‘chaparrones’ de la tarde del 18 y mañana del 19, este ha llegado a 724. “El excedente de lluvia es del 24 %”, confirmó.

Otros lugares que también acumularon grandes cantidades de agua en ese mismo período de tiempo fueron Guayaquil, con 184 mm; Puerto Ila (Santo Domingo de los Tsáchilas), con 127,5 mm; El Carmen (Manabí), con 116,1 mm, y Playas (Guayas), con 98 mm. Mientras que para el 20 y 21 de febrero, el sector de Mucho Lote fue el que más registró precipitaciones (142,5 mm).

Pero, según Arreaga, no hay por qué ‘culpar’ a las ‘travesuras’ de El Niño solamente, sino al acoplamiento de varios factores.

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“Incide la presencia del evento cálido de El Niño, en que se calienta el océano; la temporada lluviosa, la presencia constante de humedad y la oscilación de Madden y Julian (onda tropical)”, afirma. Acorde a su explicación, todas estas variables han permitido que diferentes localidades de la Costa y Sierra ecuatorianas se vean gravemente afectadas.

“El Niño provoca que una estación invernal cause un impacto más severo, como hemos visto hasta ahora”, dijo.

No obstante, los aguaceros estarían por terminar. Las lluvias más fuertes estaban previstas hasta ayer, y entre jueves, viernes y sábado estas decaerían. “Este no es el fin. Sabemos que los meses con picos de precipitaciones son febrero y marzo, y en febrero las lluvias continuarán”, expresó e instó a la ciudadanía a estar preparada.

Agregó que para marzo es arriesgado decir que lloverá mucho, pero no se podría descartar que se presenten eventos de alta intensidad en el territorio nacional. “Tal vez no sea durante todo el mes, pero sí en ciertos períodos”.

Finalmente, incluyó un ejemplo de 2023: en la mañana del 22 de marzo Guayaquil amaneció colapsada por la acumulación de agua que cayó durante más de 12 horas. “No sabemos si sería algo de la misma magnitud, pero podría pasar”, mencionó.

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