Kairi Sane, una de las estrellas emergentes más destacadas de la WWE y potencialmente una futura referente en la industria, estuvo cerca de perder la vista durante el Monday Night Raw del lunes 2 de septiembre. 

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El incidente ocurrió cuando la luchadora se lanzó desde la tercera cuerda en una peligrosa maniobra que culminó en un impactante golpe, dejando a los asistentes en Denver sin palabras al verla levantarse con el ojo ensangrentado.

 Durante el combate de Kairi Sane e Iyo Sky contra Alba Fyre e Isla Dawn por los títulos de parejas femeninos de la WWE, Sane sufrió una lesión en su ojo izquierdo. Mientras intentaba ejecutar una maniobra desde la tercera cuerda, se lanzó contra Bianca Belair, quien se encontraba fuera del ring. Sin embargo, al retrasar su salto, Sane erró su objetivo y terminó golpeando su rostro contra la mesa del locutor.

A pesar de la gravedad de la lesión, la luchadora de 35 años continuó con la pelea, a pesar de que su ojo estaba cubierto de sangre, lo que dejó atónitos a los espectadores. Más tarde, Kairi Sane tranquilizó a sus seguidores a través de su cuenta oficial de Instagram, donde compartió una foto de su herida acompañada de un emoji de pulgar hacia arriba, confirmando que se encontraba mejor. Además, mostró en sus historias el tratamiento que recibió, incluyendo los puntos de sutura que le aplicaron en el párpado.